SANTIAGO.- A partir del mediodía de hoy comenzó a desaparecer casi por completo la venta de combustibles en las estaciones de esta ciudad y el resto del Norte, de acuerdo a datos suministrados por el presidente de la Regional de la Asociación Nacional de Detallistas de Gasolina. Al propio tiempo, Abel Medina dijo desconocer hacia dónde están llevando los despachos que alega la Refinería Dominicana de Petróleo hace todos los días “pues a nuestros asociados apenas está llegando un 20 por ciento de la cantidad que solicitamos y con varios días de atraso”.
La entidad estatal, rectora de la comercialización de los combustibles, declaró que está entregando a los distribuidores el 81 por ciento de lo requerido, pero esta mañana Medina se mostró interesado en saber el destino que esas empresas dan al 60 por ciento de lo que reciben.
Con relación al panorama que se vive en las estaciones de expendio de combustibles en la zona norteña, el presidente de ANADEGAS en esta región dijo que en la Línea Noroeste, de 37 negocios, apenas cinco contaban a media mañana de hoy con un poco de gasolina.
En Puerto Plata, al igual que el Noroeste, pocas “bombas” cuentan con gasolinas y gasoils para vender mínimamente y que, si no aparece en la mañana suministro por parte de las distribuidoras, allí podría desabastecerse en el transcurso de esta tarde, en tanto que en Moca hace día que se dejó de vender gasoil.
Con relación a Nagua y San Francisco de Macorís, Medina explicó que el 60 por ciento de las estaciones no disponen de gasoil y, el 40 por ciento que vende gasolina, es de la regular, porque la primium hace días que no llega a esas comunidades.
Informó Medina que crece el temor entre los afiliados a la Asociación Nacional de Detallistas de Gasolina de que la desesperación se apodere en las próximas horas de la población consumidora, en vista de que ya es del dominio público la escasez de combustibles.
Relató que los organismos especializados del gobierno desde hace algunos días que realizan las inspecciones de lugar, con relación al desabastecimiento que se vive en las estaciones de expendio, a fin de verificar si ciertamente las distribuidoras están haciendo llegar a sus negocios los combustibles que alega despacha la Refinería Dominicana de Petróleo.