La ex vicepresidenta de la República, doctora Milagros Ortiz Bosch, propuso al Gobierno especializar un esfuerzo para enfrentar el robo de cables y metales que afecta servicios públicos esenciales, y pidió adoptar estrictos controles sobre la exportación de chatarras.
Tras definir como alarmante el nivel de impunidad con que actúan las mafias dedicadas a la sustracción, procesamiento y comercialización de metales, la doctora Ortiz Bosch sugirió la aplicación de un plan especial para impedir las acciones y sancionar a los responsables.
Recomendó al Gobierno articular un plan de acción que involucre al ministerio público, a la Policía Nacional, las Fuerzas Armadas, la Autoridad Portuaria y a los diversos organismos de inteligencia, con el apoyo del Instituto Dominicano de Telecomunicaciones (INDOTEL) y de las propias empresas afectadas por el problema.
Dijo que se debe desarrollar una campaña de orientación a través de los medios de comunicación y habilitar un centro de información telefónica para que los ciudadanos reporten los hechos vandálicos y denuncien a los autores.
La doctora Ortiz Bosch aseguró que la práctica delincuencial no solo genera pérdidas cuantiosas para el Estado y el sector privado, sino que también provoca el deterioro de importantes servicios públicos, en perjuicio de todos los ciudadanos y ciudadanas.
Entre los servicios públicos más afectados por el robo de cables y metales citó el de energía eléctrica, alumbrado público, teléfonos, telecables, semáforos y tránsito terrestre, resaltando que los delincuentes se roban las tapas de los filtrantes y colectores en las vías públicas, creando una situación de grave peligro para automovilistas y peatones.
Aseguró que el principal incentivo para el robo de cables y metales es el creciente negocio de recolección, procesamiento y exportación de chatarras, por lo que el Gobierno debe considerar la pertinencia de establecer rígidos controles sobre esa actividad, incluyendo la posibilidad de prohibir temporalmente la exportación de desechos metálicos.
Indicó que la República Dominicana se ha convertido en el principal exportador del Caribe de desechos de hierro, acero, aluminio, bronce, níkel y plomo, y que en el último año las exportaciones de esos metales se incrementaron en un 327 por ciento.
Dijo que mientras en el año 2005 las exportaciones ascendieron a 6.7 millones de dólares, en lo que va de año la cifra se ha elevado a 21.9 millones, lo que indica que el saqueo de metales se ha triplicado en apenas unos meses.
Resaltó el dato aportado por empresas nacionales que utilizan productos de cobre en el sentido de que en el último año han sufrido pérdida por más de 94 millones de pesos.