SANTO DOMINGO.- Agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) fue recibida a balazos a noche en el barrio Los Girasoles. Los miembros salvaron sus vidas milagrosamente, durante un operativo en el que fue ocupada una gran cantidad de estupefacientes y uniformes policiales, entre otros objetos utilizados por pandillas de narcos que operan en esa zona de Santo Domingo Oeste.
Asimismo, el presidente de la DNCD, mayor general Rafael Radhamés Ramírez Ferreira, anunció el arresto de tres colombianos y un venezolano con ocho paquetes de cocaína, con un peso aproximado de 10 kilos, escondidos en cajas de zapatos, así como de un extraditable e impidió la salida del país de dos ‘mulas’, una de ellas norteamericana, que viajarían al exterior con una gran cantidad de cápsulas en sus estómagos.
Ramírez Ferreira dijo que los narcotraficantes que atacaron a los agentes antinarcóticos tienen su centro de operaciones en el sector ‘Barrio Chico’, donde el mercado de las drogas es dominado por Wilson D’Oleo de los Santos, alias W; José Alexander Pérez Matos, Sergio Rivera Martínez y Aramis Castillo, a los cuales les fueron decomisados varios paquetes de marihuana y una gran cantidad de porciones de cocaína.
“Fue un ataque brutal el que recibieron nuestros agentes, pero afortunadamente ninguno resultó lesionado. Entre los atacantes habían dos hombres fuertemente armados que estaban colocados en una colina, desde donde disparaban. Esos hombres, a los que estamos persiguiendo junto a la Policía, atacaron de manera despiadada a la DNCD, pero gracias a las astucia de estos no se produjeron desgracias lamentables”, dijo.
Y con relación a los sudamericanos detenidos, el jefe de la DNCD dijo que se trata de los colombianos Rosaura Forero Beltrán, Carlos Narraos y Cirilo Logrerilla, en tanto que el venezolano es José Perozo, detenidos en el estacionamiento de un centro comercial de la Avenida 27 de Febrero realizando una transacción de narcotráfico. El arresto se produjo ayer tarde cuando los detenidos entregarían la droga.
Los extranjeros eran vigilados por miembros de la agencia antidrogas, ante la sospecha de que estaban dedicados a actividades ilícitas, logrando detenerlos en el momento que entregarían la droga a una persona no identificada, a partir de las informaciones de una fuente que colaboró con la DNCD para lograr el arresto de cuatro narcotraficantes internacionales.
Tenían los ocho paquetes, envueltos en papel color negro, en el maletero de un vehículo placa I030972, los cuales fueron enviados de inmediato al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), a los fines de determinar si se trata de cocaína, como se supone, o si es heroína. Toda la droga ocupada por la DNCD es enviada a ese organismo para certificar el tipo de estupefaciente y la calidad del mismo.
Igualmente, el mayor general Ramírez Ferreira identificó a la detenido ‘mula’ estadounidense como Josué Vizcaíno, el cual tenía escondidas 30 bolsas de cocaína o heroína en su maleta, así como otra cantidad en el estómago. El estadounidense, de origen dominicano, viajaría a Miami, Florida, en un vuelo de American Airlines, partiendo del Aeropuerto Internacional Cibao, de Santiago.
La otra mula detenida es la holandesa Richel Dennis Wanga, quien se proponía viajar a Madrid, España, con una cantidad aún no determinada de bolsitas. Dos mujeres que llevaron a Wanga al Aeropuerto Internacional Las Américas (AILA) fueron arrestadas ante la sospecha de que fueron quienes reclutaron a la extranjera para llevar la droga a su destino en el vuelo 970 de la Air Plus.
Las presuntas patrocinadoras de la ‘mula’ detenida son Niurka Felicia Taveras y Mercedes María Javier de Richardson, quienes están encerradas en la cárcel preventiva de la DNCD para fines de investigación, reveló el alto oficial, quien ofreció las informaciones por intermedio de su vocero, Roberto Lebrón. Se trata de determinar donde le fue entregada la droga a la mujer para proceder en consecuencia.
De otro lado, Ramírez Ferreira dijo que el extraditable detenido por la DNCD es Félix Zapata Mulett, de 55 años, solicitado por la justicia de EEUU para procesarlo por tráfico de estupefacientes. En su contra pesaba una orden de arresto dictada por la Cámara Penal de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), instancia que conoció su caso a partir de una petición hecha por la Procuraduría General de la República.