SANTO DOMINGO.-El mundo de hoy está inmerso en una nueva revolución tecnológica basada en la informática y la computadora se ha convertido en un auxiliar indispensable en todos los ámbitos laborales y hasta familiares. Sin embargo, esas modernas y ya indispensables máquinas que tan útiles nos resultan, pues agilizan y alivian nuestras tareas, pueden ocasionarnos padecimientos físicos, en algunos casos muy graves.
Son muchas las personas afectadas por lesiones producidas por la fatiga o los esfuerzos repetidos con los músculos del brazo (síndrome del túnel carpiano, tendinitis y epicondilitis) a causa del uso de la computadora. Otras son víctimas de problemas en el aparato óseo muscular (cervicales y lumbares), fruto de una mala postura o asientos inadecuados.
Pero de todos los trastornos que puede ocasionar el uso de la computadora el más frecuente es la fatiga ocular, que se manifiesta con cansancio en los ojos, lagrimeo, enrojecimiento y dolor de cabeza y es producida, principalmente, por los reflejos en la pantalla provocados por la colocación inadecuada del monitor o de los focos y el reflejo de imágenes o ribetes de color.
La fatiga ocular, con el tiempo, produce el deterioro de la visión, ya que el esfuerzo excesivo de los ojos al escribir, o al fijarlos en pequeños detalles mientras trabajamos en la computadora, puede afectar el músculo ciliar y alterar la capacidad de acomodación del cristalino.
Ya nos resulta prácticamente imposible prescindir de la computadora, pero como está comprobado que su uso prolongado y de forma inadecuada pueden afectarnos, médicos de diferentes especialidades nos ofrecen las siguientes recomendaciones para prevenir dilemas ergonómicos y proteger nuestra salud:
– Tome un receso de veinte minutos por cada tres horas frente al computador.
– Parpadee de vez en cuando, para que los ojos se lubriquen y produzcan aceites y enzimas procedentes de las glándulas del párpado.
– Evite el brillo excesivo sobre la superficie donde la vista está fija. Esto se puede controlar directamente en el monitor o colocando la computadora de manera que no tenga reflejos de frente. Si la luz procede del techo, baje un poco el nivel del monitor para contrarrestar este escenario.
– Descanse los ojos con frecuencia, lo que puede lograr cerrándolos y cambiando la vista hacia algún objeto lejano, ya que de esta forma acomoda el cristalino.
– Prefiera la luz natural a la artificial. Si es artificial, se recomienda utilizar simultáneamente dos fuentes: una ambiental y otra sobre la mesa de trabajo, para que no existan importantes contrastes entre lo que queda dentro y fuera del enfoque de la visión.
– Coloque la pantalla a una distancia no menor de 60 centímetros.
– Recuerde que si usa anteojos para leer, es muy probable que necesite unos especiales para trabajar con la computadora. Consulte con su oftalmólogo al respecto.
– Trabaje los textos con letras grandes y legibles, aunque al final cambie la fuente de acuerdo a los requerimientos del documento a presentar.
– Coloque los materiales con los que trabaja cerca del monitor, para evitar movimientos constantes de la cabeza y de “enfoque” de los ojos
– Visite un oftalmólogo por lo menos una vez al año para que lo someta a una buena revisión ocular, a fin de que pueda detectar cualquier problema particular y orientarlo sobre la forma de proteger sus ojos de acuerdo con sus necesidades personales.
– Siéntese conservando la espalda derecha y los brazos en un ángulo de 90°.
– Cuando sienta dolor en el cuello, deje un momento la computadora y relájese, camine y mueva la cabeza, lentamente, hacia un lado; cerrando y abriendo los ojos.
– Aumente la cantidad de minerales en su dieta, porque ayudan a la buena lubricación de los ojos. Los alimentos más recomendados para estos fines son el pescado, las papas y los plátanos.
– Haga ejercicios cada media hora, abriendo y cerrado las manos, moviéndolas y guiándolas a ambos lados, presionándolas una contra otra y estirando los dedos hacia arriba y hacia el centro.
– Cuando utilice la computadora portátil, trate de sentarse en una silla con respaldo.
– Utilice un cojín de apoyo para que cuando use el teclado pueda mantener las muñecas en línea recta; pero no se apoye en él constantemente.