SANTO DOMINGO.-El ex secretario de la Presidencial, Danilo Medina, proclamó que la gestión gubernamental peledeista está en la disyuntiva de implementar la adecuación fiscal o romper con el Fondo Monetario Internacional y poner en peligro la macroeconomía. “El gobierno tiene un dilema ahora, porque hay una situación de hecho; o permite que se mantenga el déficit potencial que se tiene para este año y con ello que se rompa el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y volvamos a la inestabilidad macroeconómica; o tiene que tomar una medida dolorosa para todo el mundo, dolorosa para el país, y entonces resolver ese problema del déficit potencial que se tiene para el próximo año”, detalló Medina en despacho divulgado por la Secretaría de Comunicaciones del PLD.
“Lo que quiero que se entienda que el gobierno tiene un dilema, o grava o pierde la estabilidad macroeconómica; porque no es posible que el Fondo Monetario Internacional te permita un manejo de un déficit potencial como el que va a terminar para este año”, acotó.
Sugirió que cuando la propuesta de rectificación fiscal llegue al Congreso Nacional, los legisladores peledeistas que son mayoría no actúen atropelladamente como lo hicieron sus predecesores, sino que se escuche a los sectores que serían afectados por el aludido proyecto y lograr el consenso en los puntos contradictorios.
Medina adelantó que el Congreso Nacional de mayoría peledeista apoyará al gobierno de esa organización, “y no va a crear una crisis a lo interno del partido asumiendo una posición contraria al Poder Ejecutivo”; precisando que el gobierno está asumiendo el costo político de la rectificación fiscal.
“Yo no creo que a nadie le interese hacer una reforma fiscal. El parto más doloroso para un gobierno es parir una reforma fiscal, porque es que nunca nadie está de acuerdo con una reforma, y si tiene que hacerlo es porque tiene un asunto muy difícil de resolver”, comentó Danilo Medina al agregar la disyuntiva de asumir el costo político o permite que se concrete la amenaza de una pérdida de la estabilidad macroeconómica.
Asimismo el integrante del Comité Político del PLD calificó de injusto los ataques propiciados por sectores adversos al gobierno por implementar tres iniciativas fiscales en dos años, recordando que la primera de ellas no fue asumida por las pasadas autoridades como correspondía.
“Y digo injusto porque ninguna de estas reformas han sido con el propósito de favorecer al gobierno”, abundó Medina al referir que la primera de las señaladas iniciativas fueron trabajadas por él junto a Temístocles Montás y Daniel Toribio durante la transición, y que la misma obedeció la necesidad “revivir” el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Acotó que cuando fueron a Washington a informarme sobre dicho acuerdo, tuvieron por respuesta que lo dieran “por muerto” y que sólo podría reanimarse si no se subsanaba el potencial déficit de 21 mil millones para el año fiscal 2004, “indispensable para detener la devaluación de la moneda” y mantener el crédito internacional.
Explicó que la gestión peledeista también heredó la coyuntura de negociación del Acuerdo de Libre Comercio con Estados Unidos y Centroamérica, que obligó al gobierno a una segunda iniciativa fiscal compensatoria del desmonte arancelario y comisión cambiaria que significaban en total 31 mil millones de pesos.
Danilo Medina manifestó que sin las medidas compensatorias que se tomaron en el 2005 el Estado se hubiese empobrecido dramáticamente y quedando en incapacidad de enfrentar sus compromisos.
“Y la mejor demostración de que eso es así es que este año el índice de precios al consumidor no va a llegar siquiera a siete puntos porcentuales, que está dentro de lo que se conoce como el crecimiento vegetativo de la economía”, dijo.
Sostuvo igualmente que los ingresos fiscales se redujeron doblemente por el cambio de gasolina a GLP en los vehículos de transporte, por vía del diferencial de los combustibles y el subsidio al combustible para cocinar; así como el cambio de valoración a las bebidas alcohólicas y específicamente al hábito de consumo de cervezas.
“Si tomamos entonces el impuesto al gasoil que no se está cobrando, así como a la cerveza y la pérdida en los combustibles, eso nos da un déficit en las recaudaciones en cerca de 12 mil millones de pesos al gobierno”, concluyó Danilo Medina.