SANTIAGO.- Luego de ser intervenidos quirúrgicamente (algunos de ellos en más de una ocasión) finalmente los nueve niños que sufrieron quemaduras al fallar el sistema de gas propano de una camioneta el mes pasado, regresaron a sus hogares completamente restablecidos. Se trata de Jean Carlos Marte, Katerin Pérez Marte, Sonia Smith Payano Muñoz, Anderson Leonardo Marte, Arisleydi Marte Tejada, Yessica Marte, Ariel Marte Tejada y Yuleida Cepeda López, quienes el viernes 11 de noviembre pasado fueron víctimas de las llamas, mientras ocupaban la parte trasera del vehículo.
La noche de ese día los nueve infantes (hermanos y primos) fueron llevados a la unidad de niños quemados, del hospital regional universitario “Doctor Arturo Grullón”, de esta ciudad, donde sometidos a cirugías. Algunos de ellos llegaron al centro asistencial en estado delicado.
Pero, tras varios días de internamiento, tiempo al que fueron sometidos a extensos chequeos médicos, por parte de los especialistas que dirige el doctor Julio Marte Simé, paulatinamente se logró readecuar los órganos que fueron afectados por el incendio.
Marte Simé, director de dicha dependencia hospitalaria, resaltó el trabajo que hicieron los galenos que trataron todo el tiempo a los niños afectados por el fuego, mostrando su satisfacción “porque logramos, en el menor tiempo posible, restaurar sus cuerpecitos y así hacer que regresaran a sus familias completamente recuperados”.
Entre los accidentados hay dos hermanitos gemelos, de tres meses de nacido, así como las hermanas Katerin y Yessica Pérez Marte, de tres y nueve años, respectivamente.
El hecho se produjo cuando Cornelio Marte conducía la camioneta por la comunidad La Llanada, de La Vega, llevando en la parte trasera de la misma a 13 menores y tres adultos, quienes participarían en la boda de oro de sus padres y abuelos Domingo Antonio Marte Rodríguez y Poligenia Marte Blanco, que se celebraría al día siguiente en Jimayaco Arriba, de esa provincia.
Sólo cuatro de los niños salieron ilesos: los hermanos Heriberto y Arístides Marte Fajardo, así como sus primos Edison Marte Muñoz y Yeri Antonio Pérez Marte.
Cornelio, quien terminó con quemaduras en su mano derecha, narró que sintió un olor a quemado y que de inmediato detuvo la camioneta, pero pensando que el problema estaba en los neumáticos, "porque la familia tenía casi siete años con el vehículo funcionando con gas propano y nunca se había producido el más mínimo problema".
Al agacharse para ver las gomas, fue entonces cuando se percató que se trataba del inicio de un fuego, por lo que procedió a bajar de la camioneta a los niños, pero que las llamas se propalaron con rapidez, por lo que nueve de ellos y dos mujeres (Daysi Valdez y Sonia Muñoz) sufrieran quemaduras.