Santiago, 29 de diciembre.- La propuesta de reforma constitucional y aplicación de la nueva reforma fiscal, fueron dos de los temas que durante el año que transcurre ocuparon la atención de los diversos sectores de la sociedad dominicana, debido a su incidencia en el seno de la sociedad.
Tan pronto el presidente Leonel Fernández planteó la necesidad de una modificación a la Constitución de la República, para lo cual designó una comisión encabezada por Agripino Núñez Collado, surgieron diversas opiniones de los diferentes sectores sobre su aprobación y rechazo, así como la forma en que se haría.
Aunque se han desarrollado consultas sobre la propuesta de modificación, este tema pasa al año 2007 sin ninguna definición de la forma en que se harán los cambios a la Carta Magna, debido a que algunos propugnan porque se haga vía una constituyente y otros a través de asamblea revisora.
Será a partir de este nuevo año cuando deberán definirse los pasos y aspectos que deberán tomarse en cuenta, para llevar a feliz término lo que será la modificación constitucional, que deberá adecuar ese estatuto a las exigencias de los nuevos tiempos, como aspira la mayoría de los dominicanos.
Otro tema que ocupó por varios meses la atención nacional, fue la aplicación de la ya aprobada reforma fiscal, con la que el Gobierno procura recaudar 36 mil millones de pesos, para cubrir el faltante que dejará de percibir con la eliminación de impuestos, por la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio del país entre los Estados Unidos y Centro América.
La pieza en la que se incluye nuevos impuestos a los combustibles, vehículos, seguros, artículos de primera necesidad y otros, fue aprobada el pasado miércoles en la Cámara de Diputados, después de haber sido sancionada en el Senado, por lo que ahora, sólo falta la promulgación por parte del Poder Ejecutivo para su aplicación en enero.
Este controversial proyecto tuvo la oposición de los empresarios y diversos sectores productivos de la sociedad, en el entendido de que esa medida empeorará aún más lacrítica situación económica por la que atraviesa el país.
Sin embargo, el Gobierno haciendo uso de la mayoría de congresistas en ambas cámaras, pues dispuso la aprobación de las nuevas cargas impositivas que afectan además las bebidas alcohólicas y otros productos.