SANTO DOMINGO.- El Instituto Nacional de Recursos Hidraulicos (Indrhi) dio a conocer el resultador de su labor el pasado año, en un balance escrito en el que establece que invitió mas de RD$830.1 millones. El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) invirtió más de RD$830.1 millones durante el 2006, en la formulación, ejecución y seguimiento de numerosos proyectos que incidieron directamente en el incremento de la producción y productividad de los cultivos en áreas bajo riego y que se reflejaron en la mejoría de las condiciones de vida de unos 89,000 regantes y sus familiares, diseminados en todo el país.
Los trabajos enfatizaron en el mejoramiento de la infraestructura hidráulica y la tecnificación del riego, en las que se invirtieron unos RD$755 millones, y en el fortalecimiento de las Juntas de Regantes, con la creación de cuatro nuevos Centros de Gestión de Agronegocios y Centros Audiovisual-Biblioteca (CEGA-CABI), para la capacitación de los usuarios y hacer más competitiva y moderna las actividades de producción de alimentos en las áreas irrigadas.
El ingeniero Frank Rodríguez, director del INDRHI, calificó de exitosa su gestión institucional durante el año pasado y dijo que la misma está enmarcada por los lineamientos del presidente Leonel Fernández, para encauzar la zona rural por senderos de modernidad, aumentar los empleos y reducir de modo efectivo la pobreza y la indigencia.
Entre los trabajos más resaltantes del INDRHI en el período está el programa “Soluciones Rurales”, mediante el cual se invirtieron RD$137.7 millones en labores puntuales para resolver problemas hídricos de habitantes rurales pobres e indigentes radicados en lugares apartados del campo dominicano, así como de personas residentes en barrios marginales urbanos que, entre otras limitantes, no disponían de agua potable ni de instalaciones de saneamiento.
Dentro de este programa se perforaron 1,411 pozos (89 ganaderos, 70 agrícolas, 328 filtrantes, 436 comunitarios y 488 solicitados por núcleos urbanos pobres para resolver problemas derivados de la carencia de agua o dificultades de drenajes en barrios, escuelas, iglesias, hospitales, orfanatos y cárceles). La mayoría de esos pozos fue dotada de bombas manuales (malacates), eléctricas o motobombas.
Con estos pozos se benefició a 142,830 personas, quienes enfrentaban problemas de agua debido a la escasez de lluvias en los sitios donde residen y a las largas distancias que debían recorrer para conseguir el vital líquido; también se garantiza el riego a 61,560 tareas, que fueron incorporadas a la producción agrícola, y se favorece a 3,560 cabezas de ganado.
También se construyeron 79 lagunas, para aumentar la disponibilidad de agua en 11,850 tareas de pequeñas fincas destinadas a la producción agropecuaria y al fomento de la piscicultura.
Con este programa el INDRHI contribuye no sólo a solucionar situaciones deficitarias críticas, sino que ha logrado que los pobladores rurales beneficiarios aumenten sus ingresos y con ello mejoran sustancialmente sus condiciones de salud, alimentación y nutrición.
En lo concerniente a infraestructuras de riego, el INDRHI invirtió RD$505.1 millones en la construcción y/o rehabilitación de los canales Las Lajitas, en Neiba; Jimaní, en Jimaní; Jínova, en San Juan de la Maguana; Nizao-Najayo, en Baní; Unificador, en Ocoa; La Culebra, La Gina y El Cedro, en Miches, y Las Yayas de Viajama, en Azua.
Igualmente se construyeron las obras complementarias de la presa derivadora de Villarpando, en Azua; la rehabilitación del reservorio El Llano, en Baní; construcción de muros de gaviones en los ríos Cordobín, Unijica, Camú, San Marcos y El Mamey, en Puerto Plata; el dragado de los ríos Yuna, en la desembocadura de Samaná, y Jura, en Azua, y la limpieza y mantenimiento de los sistemas de riego que ha hecho la institución en todo el país.
Durante el año 2006, el Proyecto de Desarrollo Territorial Rural Cordillera presentó notables avances. Mediante esta iniciativa, con la cual procura mejorar la calidad de vida a unas 1,142 familias que residen en decenas de comunidades localizadas en la parte sur de la Cordillera Central, el INDRHI dotó de energía eléctrica al poblado El Tetero, readecuó caminos e inició la construcción de una clínica y una escuela en Las Cañitas, que se encuentran en fase de terminación.
En Pedernales inauguró la segunda etapa del proyecto de riego por goteo Los Olivares, con una inversión de RD$15.1 millones. Su ejecución ha incentivado la producción de rubros agrícolas de alto valor comercial, lo cual contribuirá al mejoramiento de las condiciones económicas y sociales de esa población fronteriza. Beneficia directamente a un centenar de productores y a sus familias.
También desarrolló acciones que consolidaron el Proyecto de Desarrollo Agrícola Baiguá, que ejecuta en 21,735 tareas del municipio San Rafael de Yuma, en Higüey, con la finalidad de que los 303 miembros de la Junta de Regantes local pasen de una agricultura tradicional a un tipo de siembra por contrato, cuya producción está orientada a satisfacer parte de la demanda del sector turístico enclavado en La Romana, Bayahibe y Bávaro.
Con este proyecto ya se han logrado importantes cosechas de lechosa, melón, ajíes, brócoli, coliflor, lechuga, cebolla, repollo, zanahoria, papa, pepino, remolacha, calabacín, apio, berenjena y otras hortalizas y vegetales de cuyas ventas se han obtenido elevados ingresos que han mejorado la forma de vida de los productores y dinamizado la economía de la comunidad.
En el 2006 el INDRHI inició en Baiguá, en Los Olivares, y en los Proyectos de Riego Las Lajitas, en Neyba, y Azua II, en el Valle de Azua, la aplicación de la agricultura de precisión, un concepto de producción que utiliza tecnología de punta para optimizar el riego y aumentar la productividad.
Los CEGA-CABI
El ingeniero Rodríguez dijo que el programa CEGA-CABI es uno de los más trascendentes de su gestión por cuanto está centrado a capacitar y asesorar a los usuarios del riego, en lo productivo y comercial, así como a aumentar la capacidad su gestión para que puedan competir airosamente frente a la apertura de mercados signada por los tratados internacionales.
“Los CEGA-CABI son unidades de apoyo a las Juntas de Regantes para hacer más competitiva y moderna las actividades de producción de alimentos en las áreas bajo riego. En este sentido procuramos que estos centros contribuyan al diseño de programas de producción compatibles con la información obtenida sobre precios y mercados, asistiendo a los usuarios del riego en el proceso de transformación de sus parcelas a unidades de negocio rentable, y propiciando de esta forma la reconversión productiva requerida para el aumento del empleo y la disminución de las pobrezas en el medio rural”, explicó Rodríguez.
En 2006 se construyeron CEGA-CABI para las Juntas de Regantes Villa Vásquez, en Montecristi; Valle de Azua, en Azua; Río Camú, en Ranchito, La Vega, y Presa de Rincón, en Jima, La Vega. También se construyó (está próximo a inaugurarse) el CEGA-CABI de la Junta de Regantes Valle de San Juan, San Juan de la Maguana. Estas instalaciones completan las cinco construidas el año anterior, ubicadas en Las Matas de Santa Cruz, Esperanza, Arenoso, Pedernales y San Rafael del Yuma.
En el pasado año, y para fortalecer la línea de trabajo de los CEGA-CABI, el INDRHI también puso en marcha sendos acuerdos de capacitación firmados con el Instituto Tecnológico de Monterrey (ITESM), de México, y la Escuela de Ingenieros Técnicos Agrícolas del Instituto Nevares de Empresarios Agrarios, de España, para ofrecer cursos de educación a distancia dirigidos a los productores y familiares, a fin de desarrollar una agricultura bajo riego más rentable y eficiente, tanto en el manejo de los cultivos como de los recursos de agua y suelo.
Fruto del acuerdo con el ITESM, una delegación de 29 usuarios de riego y técnicos del INDRHI realizó una visita a México para conocer experiencias sobre el uso del agua y las técnicas de producción, empacado y comercialización agrícolas utilizadas en algunos Estados (Nuevo León, Tamaulipas y Sinaloa) de la nación azteca.
Publicaciones
El INDRHI, para poner en conocimiento de la sociedad dominicana las actividades que realiza y transparentar la gestión pública, inició en 2006 un programa nacional de publicaciones, mediante el cual puso en circulación los libros: “Estadísticas del Agua en la Republica Dominicana”, con informaciones cuantitativas relevantes sobre la situación de los recursos hídricos del país; “El INDRHI en el desarrollo nacional”, que contiene un análisis histórico de las vertientes institucional, estrategia y operatividad de la institución, desde su creación hasta el presente, y “Las Juntas de Regantes: La Gobernanza del Riego”, que analiza a las Juntas y Asociaciones de Regantes, Organizaciones Asociativas Privadas, legalmente reconocidas, a las que el INDRHI ha transferido la operación, mantenimiento y conservación de los sistemas de riego en los que ellas están localizadas.