El Martes 16 de Enero, la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) publica en los periódicos un espacio pagado de dos páginas en donde se detalla en qué consiste la renegociación anunciada del Acuerdo de Madrid (AdM) Al leer la información, la conclusión es la siguiente.
1. No ha habido renegociación de los contratos del AdM con los generadores privados.
2. No habrá ninguna renegociación del contrato IPP de compra y venta de energía firmado en el 1998 entre la CDEEE y Cogentrix.
3. La renegociación que se ha producido es de la potencia contratada entre la CDEEE bajo el AdM (100 Mw) con las empresas distribuidoras, dos de las cuales son 100% estatal (Edenorte y Edesur) y la otra 50% estatal (Eddeste) Esta renegociación unilateral de la potencia de CDEEE con esas generadoras es algo que se venía reclamando e insistiendo desde hace mas de un año, bajo la premisa de que con ello la CDEEE dando el ejemplo como lo ha hecho, envía una señal clara a los generadores privados para que renegocien los contratos No se podía reclamar reducción de precios en los contratos si quien reclamaba esa reducción no daba primero el ejemplo. Ahora hay que esperar la reacción y actitud de los generadores privados a ver si siguen el ejemplo de la CDEEE, quienes hasta la fecha han planteado diversos motivos y razones para no acoger la propuesta de renegociación en los términos planteados por las autoridades del sector eléctrico.
4. Se afirma que la Comisión Renegociadora de los Contratos está renegociando con tres empresas generadoras privadas pero que se abstienen de decir los nombres por que los generadores así se lo han pedido Daría la impresión por esta declaración, que la renegociación que llevan a cabo esas empresas es un hecho que las avergüenza razón por la cual no quieren que la opinión pública sepa sus nombres.
5. En el documento publicado por la CDEEE, textualmente en una de las conclusiones se dice lo siguiente " La CDEEE ha decidido ajustar los 245 Mw. que tiene contratado con las empresas distribuidoras a la fórmula propuesta por la Comisión Renegociadora de los Contratos, lo que no implicara una reducción de precios significativa en el caso de los 145 Mw. que ya han sido contratados fuera del AdM. Para los 100 Mw. restantes que están incluidos dentro del AdM, la reducción de precios será de alrededor de 4 centavos de dólar por kilovatio-hora, a los precios actuales de los combustibles. Del mismo modo, todos los contratos de CDEEE con las empresas distribuidoras tendrán una duración máxima de tres años".
6. La afirmación anterior pone en evidencia que las distribuidoras han contratado potencia con los generadores fuera del AdM. Según los datos publicados por el Organismo Coordinador del Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (OC), a partir de finales del 2004, las distribuidoras han contratado sin licitación, un total de 299 Mw. de nueva potencia con los generadores privados y la CDEEE, que equivale al 25.8% de los contratos del AdM (1,160 Mw.), situación que ha producido que en promedio las distribuidoras tengan bajo contrato el 93% de la demanda en violación a la Ley General de Electricidad (LGE), la cual establece que la potencia máxima bajo contrato no debe exceder el 80% de la demanda. La mayor cantidad de la nueva potencia contratada, 145 Mw. equivalentes al 48.5%, corresponde a la CDEEE. Los nuevos contratos firmados con los generadores privados no se han hecho bajo los criterios de formula de compra de energía contenidos en la propuesta gubernamental de renegociación de los contratos y en consecuencia sus precios son muy similares (por no decir iguales) a los del AdM, que las autoridades dicen están sobrevalorados en un 30%.
7. La contratación de nueva potencia fuera del AdM por parte de las distribuidoras, desmiente las continuas y recurrentes afirmaciones de las autoridades de que el AdM imposibilita a las distribuidoras la contratación de nueva generación por concurso a precios competitivos.
8. Por primera vez las autoridades reconocen públicamente que la CDEEE fue la mayor beneficiaria en la asignación de potencias en el AdM, con 490 Mw, equivalentes al 38% del total de potencia asignada en dicho Acuerdo (1,290 Mw.)
9. El documento publicado por la CDEEE rectifica afirmaciones anteriores de las autoridades cuando afirmaban que las empresas Dominican Power Partners (DPP) y Compañía Electricidad de Puerto Plata (CEPP) habían sido signatarias del AdM, acusando de ilegales dichos contratos. Ahora se reconoce públicamente que los contratos de DPP y CEPP con las distribuidoras fueron traspasados por la CDEEE de la potencia que dicha empresa estatal se reservo en el AdM y ya no se utiliza el calificativo de ilegal.
10. Se afirma que el contrato del tipo IPP que tenia CEPP con la CDEEE vencia el 2004 Lo que no se dice es que CEPP poseía dos contratos con la CDEEE, uno que vencía efectivamente en el 2004 y el otro en el 2011. Como los precios de energía contratados bajo el AdM son un 36% mas bajos que los de la Capitalización y alrededor de un 60% mas bajos que los precios que poseía CEPP en su contrato con la CDEEE, la manera de compensar a CEPP por la reducción en el precio de energía a que vendería a las distribuidoras fue mediante la extensión del contrato de compra y venta de energía con Edenorte traspasado por la CDEEE a CEPP, por un periodo de tiempo superior al vencimiento de los contratos IPP que tenían firmado con la CDEEE, los cuales le generaban cuantiosas perdidas al Estado ya que el precio a que CDEEE compraba la energía era mayor al precio a que las distribuidoras le pagaban a la CDEEE por esa misma energía.
11. Se dice que el contrato IPP que tenia DPP con la CDEEE en vez de ser traspasado a Edeeste, debió haber sido renegociado ya que la al final del mismo las plantas pasaban a ser propiedad de la CDEEE Uno se pregunta, ¿por qué razón ese contrato no fue renegociado en el periodo 96-2000? Lo que no se dice es que el contrato de DPP que vencía en el 2010, era uno de los contratos más lesivos y que más perdidas le producía a la CDEEE ya que las plantas tipo turbinas a gas operaban con gasoil que es el combustible más caro que existe para generar electricidad. Para la CDEEE liberarse de ese contrato oneroso para las finanzas publicas que generaba pérdidas superiores a los US$3 millones mensuales, se acordó el traspaso a Edeeste a los precios del AdM , con unos precios de energía inferiores en por lo menos un 100% a los precios firmados con CDEEE, debido a la conversión que se haría a las plantas para que trabajaran con gas natural Para compensar la reducción en el precio de la energía y el pago por capacidad que tenia el contrato de DPP y la eliminación de la clausula contractual que establecía que el pago por capacidad habría que hacerlo generara la planta electricidad o no (condición que también existía en los contratos de CEPP) y además para compensar los costos de conversión de las plantas para utilizar gas natural y la construcción del gasoducto desde Andrés hasta Los Minas, la CDEEE acepto cambiar la clausula contractual que establecía que al final del contrato la planta pasaría a ser propiedad de la CDEEE. Lo que no se dice es que el contrato IPP de Cogentrix firmado en el 1998 con la CDEEE, establece que a pesar de que en 20 años la CDEEE paga a Cogentrix mas de US$800 millones por concepto de capacidad, que es el concepto a través del cual el inversionista recupera la inversión en la planta, al final del contrato la planta queda en poder de los inversionistas privados.
12. Se acusa a los generadores privados de comprar energía barata en el mercado spot para venderla mas cara a las distribuidoras y que esta acción perjudica a la CDEEE empresa que suple cerca del 90% de la energía del spot. Lo que no se dice es que los precios en el mercado spot son artificialmente más bajos que los precios de la energía que compran las distribuidoras bajo contrato con los generadores, debido a la política de restricción que han impuesto las actuales autoridades a partir de finales del 2004, para supuestamente reducir las pérdidas de las distribuidoras ocasionadas por la pésima gestión de las mismas. Esta política de demanda restringida hace que un número de plantas no puedan ser despachadas para generación obligando a los generadores privados a comprar energía artificialmente más barata en el spot para venderla más cara bajo contrato a las distribuidoras Si no existiera esta política de restricción de la demanda, el precio de la energía en el mercado spot sería más caro que la de contrato con las distribuidoras y las plantas que hoy no son despachadas podrían generar, con lo cual se eliminaría la distorsión que existe en la actualidad que favorece a los generadores privados y perjudica a la CDEEE y a las distribuidoras.
La reducción anunciada de US$0.04/Kwh. en los contratos de CDEEE con las distribuidoras, equivalentes a un 33.3%, producirá un aumento en el subsidio al sector eléctrico, ya que en la medida que aumente la generación de Cogentrix y Smith and Enron, aumentan las pérdidas para la CDEEE en una proporción mayor a la rebaja que la CDEEE le ha realizado a las distribuidoras en los contratos que posee con esas empresas. La potencia efectiva que CDEEE entrega al sistema eléctrico (unos 500 Mw.) es mayor que la potencia contratada por la CDEEE con las distribuidoras (245 Mw.).
Un análisis realizado a la información publicada por la CDEEE muestra que si la generación de Cogentrix y Smith and Enron aumenta por encima del 12% anual con relación al promedio de la energía generada por esas plantas en el periodo 2004-2006, las perdidas que tiene CDEEE debido a este incremento en la generación de las plantas son superiores a la rebaja en el precio de la energía que CDEEE le ha dado a las distribuidoras, produciendo en consecuencia un aumento en el subsidio anual a entregar al sector eléctrico por parte del Estado
Para un aumento anual entre un 15% y un 100% en la generación de Cogentrix y Smith and Enron con relación al promedio generado en el periodo 2004-2006, el aumento anual en el subsidio al sector eléctrico seria entre US$7.3 millones a US$215.8 millones, para un promedio mensual entre US$0.6 millones y US$18.0 millones, La generación promedio anual de Smith and Enron y Cogentrix para el periodo 2004-2006 según los datos publicados por la CDEEE fue de 1,440.33 Gwh., mientras que esas dos plantas pueden generar con un factor de utilización del 80%, unos 3,364 Gwh/año.
En cambio, si la generación anual promedio de Cogentrix y Smith and Enron se mantiene igual o en un máximo de aumento de un 12% con relación a la generación promedio anual del 2004-2006, entonces la reducción en el subsidio eléctrico puede variar de cero, para un aumento del 12% de la energía generada, a US$29.4 millones anuales, para un promedio de US$2.5 millones mensuales, si la energía anual generada por esas dos plantas se mantiene al mismo nivel que la energía media anual generada en el periodo 2004-2006. Si la energía generada por Cogentrix a Smith and Enron disminuye con relación al promedio generado en el periodo 2004-2006, entonces la reducción en el subsidio al sector eléctrico por parte del estado aumenta.
Este anuncio de renegociación unilateral de los contratos de la CDEEE que se ha realizado con un gran despliegue propagandístico y mercadologico, tendrá muy poco impacto (por no decir ninguno) en la tarifa eléctrica de los usuarios y podría producir un aumento significativo en el subsidio del Gobierno al sector eléctrico dependiendo de la generación anual de las plantas IPP de Cogentrix y Smith and Enron.
Este hecho, unido a la renuncia irrevocable del gerente extranjero de Edesur por razones "familiares" hecha pública días después de la reunión celebrada a puertas cerradas en el Palacio Nacional con el Presidente de la República con la participación de las autoridades y miembros del sector eléctrico, unido al aumento de las pérdidas de las distribuidoras al pasar de un 39% en el 2004 a un 46% en el 2006, según un informe reciente del Banco Central, al incremento de los apagones, al aumento del subsidio en el sector eléctrico al pasar de US$250 millones en el 2004 a US$530 millones en el 2006, al aumento de US$190 millones de la deuda corriente de las distribuidoras con los generadores en el 2005 y 2006, es una señal clara de que la situación del sector eléctrico no es tan promisoria y halagadora como se quiere presentar