SANTO DOMINGO.-La jefatura de la Policía Nacional ofrecició este jueves un balance del estado de la seguridad ciudadana, en el que establece que los avances logrados en la gestión del presidente Leonel Fernández. El balance resumido en un documento enviado por el general Simón Díaz hace im relato detallado de la labor desplegada por las autoridades, en el que destacan "la situación de inseguridad ciudadana heredada por la gestión de gobierno del Presidente Dr. Leonel Fernández Reyna, que mantuvo en vilo a la sociedad dominicana, en especial, durante los años que abarcan del 2003 al 2005".
A continuación el texto completo de la declaración:
La situación de inseguridad ciudadana heredada por la gestión de gobierno del Presidente Dr. Leonel Fernández Reyna, mantuvo en vilo a la sociedad dominicana, en especial, durante los años que abarcan del 2003 al 2005".
Esta alarma se expresaba a diario en los medios de comunicación social y en las conversaciones en los hogares, puestos de trabajo y entre amigos. El origen de estas preocupaciones no sólo estaba justificado en el aumento de los actos delictivos y criminales, sino, en la naturaleza cruenta de muchos de ellos y la impunidad con que se movían los delincuentes en ciudades y barrios; ya que las autoridades policiales y judiciales no contaban con un plan de contingencia coherente y viable para enfrentar dicha situación, como tampoco contaban con el personal y la logística necesaria para su labor.
Si observamos la evolución de los homicidios en esta década, encontramos que en 1996 se produjeron 1,032, en 1997 (1,038), en 1998 (1,121), en 1999 (1,187), en el 2000 (1,099), en el 2001 (1,065). Hasta aquí la situación era tolerable y no había alarma en los medios de comunicación social. Sin embargo, a partir del 2002 se inicia una escalada con 1,242 homicidios que siguió en el 2003 (1,902), 2004 (2,242) y en el 2005 (2,236). La tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes se incrementó a casi el doble de la tasa del año 2000, esto es, de 12.9 a 25.
El temor de los ciudadanos a ser agredidos por los delincuentes llegó al extremo de que a partir de las seis de la tarde, se produjera una especie de estampida cuyo objetivo era llegar con prontitud al hogar para refugiarse de los antisociales. Muchos venduteros de la calle declaraban que si no les daba tiempo a entrar a su barrio a las seis de la tarde, preferían dormir en casa de un familiar, un amigo o una pensión, pues así evitaban que los atracaran para quitarle el producto de las ventas del día.
Otra manifestación de la violencia era que los ciudadanos habían perdido el disfrute de las áreas comunitarias, pues, los delincuentes decretaban “toques de queda barriales” a partir de las seis de la tarde, para ellos actuar a sus anchas, sobre todo, para operar “puestos de drogas” en las esquinas del barrio. Era una época en que las pandillas llamadas autodenominadas “naciones” imponían el terror en los barrios periféricos y se desplazaban con libertad por los cascos urbanos en busca de víctimas, algo que ellos llegaron a designar con el eufemismo de “patrullajes”.
Como es lógico suponer, todo esto, alteraba las operaciones comerciales, las actividades nocturnas, tanto de trabajo, como recreativas de la comunidad. Se llegó a modificar los horarios de las actividades religiosas, como las misas y reuniones de grupos de oración.
El estado de inseguridad ciudadana era tal que hizo que el Presidente Dr. Leonel Fernández reyna proclamara en su discurso de juramentación que:
“La República Dominicana no puede seguir como va. No puede seguir con la inseguridad ciudadana. Con el tráfico de influencias. Con el clientelismo. Con el enriquecimiento ilícito. Con el abuso de poder. Con el irrespeto. En fin, con la falta de seriedad en todo” (16 de agosto 2004).
La respuesta de la presente gestión fue abocarse a realizar un diagnóstico de la situación real, la formulación de una estrategia antidelincuencial y su puesta en ejecución en el menor plazo posible, con el fin de devolverle la paz y el sosiego a la familia dominicana.
La fase de diagnóstico y formulación del plan abarcó ocho (8) de los barrios más afectados en Santo Domingo (Capotillo, Gualey, 24 de abril y Villas Agrícolas) y en Santiago de los Caballeros (La Joya, La Otra Banda, La Yagüita del Pastor y Cienfuegos); en el período comprendido entre el 16 de agosto 2004 al 19 de agosto 2005, cuando se puso en marcha el Programa Barrio Seguro en el sector de Capotillo y se inició la gestión policial del Mayor General Lic. Bernardo Santana Páez.
Para llevar a cabo esta labor el gobierno acudió a la asesoría y respaldo de organismos internacionales y países amigos como los Estados Unidos, Francia, España y Colombia, entre otros. En la asesoría destacaron el Instituto Interamericano de Derechos Humanos, el John Jay College Of Criminal Justice (New York), la Universidad Internacional de la Florida y Newlink Political (Florida).
El más grande de los retos de este gobierno fue enfrentar la delincuencia, sin que se produjera una degradación del disfrute de los derechos humanos.
Los principales datos que arrojó la etapa de diagnóstico de la situación fueron:
1- La población desconfiaba de los agentes policiales de servicio en los barrios, por el grado de corrupción y connivencia con los delincuentes. Algunos ciudadanos expresaron en las encuestas que preferían acudir a los propios delincuentes para recuperar las pertenencias que le habían sido robadas, antes que acudir a la policía. Por su parte, los agentes policiales percibían a los residentes en los barrios como encubridores y asociados de los delincuentes.
2- Que el terror había logrado que los ciudadanos no se atrevieran a desafiar a los delincuentes y que estos se convirtieran en dueños de los espacios comunitarios.
3- Que los barrios se convertían en campos de enfrentamiento entre bandas de narcotraficantes por el control del microtráfico de drogas (“puestos de droga”). Muchos de estos enfrentamientos, tanto a tiros como con armas blancas (denominadas “sacahígados”) terminaban con ciudadanos honestos como víctimas. Era frecuente que las llamadas “balas perdidas” entraran a los hogares y causaran la muerte o lesiones a personas, en especial, niños y niñas.
4- Incapacidad de la policía para enfrentar la delincuencia debido a falta de recursos (personal y equipamiento) o por corrupción.
5- Accionar policial errático asociado a prácticas coercitivas indiscriminadas, o peor aún, abstenerse de cumplir con su deber de actuar contra la delincuencia.
Todo culminó en el denominado por el Presidente Fernández Reyna como Plan de Seguridad Democrática.
Este plan ha funcionado en seis áreas maestras que son:
1- El desarrollo de una policía preventiva eficaz.
2- Una profunda reforma académica para la formación de mejores policías.
3- El desarrollo e implementación de un sistema moderno de investigación criminal adecuado a las realidades de la democracia dominicana, incluyendo el equipamiento de los laboratorios forenses, de balística, dactiloscopia, etc.
4- El acercamiento de la Policía Nacional a la sociedad civil a través de la Policía Comunitaria.
5- El diseño y organización gerencial para su eficiencia en la administración y equipamiento para que cada área cumpla cabalmente con sus funciones.
6- El desarrollo de un programa efectivo de Asuntos Internos para el control de la Policía Nacional, responsable de la reducción sistemática de la corrupción, de profesionalizar a sus miembros con tecnología para la inteligencia criminal y crear una institución que responda a los intereses de los ciudadanos.
Con la designación del Mayor General Lic. Bernardo Santana Páez e dio inicio el 19 de agosto 2005 del Plan en el sector de Capotillo y luego, se expandió a 12 barrios de la zona norte de Santo Domingo (9 de enero 2006) y luego a 13 barrios de Santiago (1 de abril 2006).
El piloto del Programa Barrio Seguro se instauró en capotillo con un grupo de 230 efectivos policiales que realizan patrullaje a pie y motorizado, para el cual se dispuso de 14 motores y 6 camionetas, así como 30 radios de comunicación.
Los barrios de Santo Domingo agregados al Programa Barrio Seguro fueron:
1.- Gualey. 7.- 24 de Abril.
2.- Simón Bolívar. 8.- Luperón.
3.- Las Cañitas. 9.- Ens. Espaillat.
4.- La Ciénaga. 10.- La Zurza.
5.- Guachupita 11.- 27 de Febrero.
6.- Villas Agrícolas 12.- Los Guandúles.
Los barrios de Santiago fueron:
1-La Yagüita de Pastor. 7- Ensanche Espaillat.
2- Ensanche Bermúdez. 8- Pekín.
3- La Otra Banda. 9- Cienfuegos.
4- Gurabo. 10- Bella Vista.
5- Mella II. 11- Yapur Dumit.
6- Mella I. 12- Cerros de Papatín y,
13- Mari López.
Los logros obtenidos por el Plan de Seguridad Democrática y su Programa Barrio Seguro han sido extraordinarios, superando todas las expectativas que sus ejecutores se habían planteado.
Los principales son:
1- Haber recuperado la confianza de la mayoría de los ciudadanos en la institución policial. Esto puede constatarse por los resultados de la encuesta Gallup-Hoy que dan a la policía Nacional un 60% de aceptación. Cuando en la etapa de diagnóstico sólo era de 12%. Además, el tema de la inseguridad ciudadana ha salido de las primeras planas de los periódicos.
2- Se han recuperado la paz y el sosiego en las ciudades y barrios, y las relaciones policía-comunidad se encuentran en un nivel de mutua cooperación, sobre todo, a partir de las medidas antidelincuenciales adoptadas por el Presidente Dr. Leonel Fernández Reyna a raíz del Consejo de Gobierno Ampliado del 24 de julio 2006.
3- La recuperación de personal policial que no estaba sirviendo en funciones propias de su investidura, ha permitido elevar el número de agentes en patrullaje de una media de 900-1000 diarios en agosto 2005 a una media de 9,000-11,000 en diciembre 2006. En este terreno ha sido muy útil la eliminación de las llamadas “Compañías” y la creación de Direcciones Centrales y Regionales.
4- Los dos puntos geográficos más preocupantes por su grado de actividad delictiva, eran Santo Domingo y Santiago de los Caballeros, Pero, con una labor extraordinaria de la Dirección Central del Distrito y la Dirección Regional Cibao Central se ha logrado una reducción de un 30% de la delincuencia y la criminalidad.
5- La reforma del sistema educativo de la Policía Nacional ha entrenado más de 10,000 agentes en todas las áreas del quehacer policial. En esta labor destacan el Instituto de estudios Superiores de la Policía (IEESPON) y el Instituto de Dignidad Humana (IDIH), así como, la Escuela de Seguridad Ciudadana (Hatillo. San Cristóbal) y la Academia Policial 2 de Marzo (Hatillo. San Cristóbal).
6- La calidad del trabajo policial para el sistema de administración de justicia, ha tenido un excelente repunte como una consecuencia directa de la remodelación, equipamiento y entrenamiento de la Policía Científica.
7- Los entrenamientos de nuevos cuerpos elites como los grupos de acción rápida (LINCE y SWAT) le han dado mayor movilidad y rapidez de intervención a la Policía Nacional.
8- El saneamiento de las filas policiales ha aumentado la credibilidad de la institución ante la sociedad civil. La Dirección Central de Asuntos Internos ha realizado más de 5,000 pruebas antidoping y se han separado de las filas más de 600 agentes por haber dado positivo en estas pruebas y por otras faltas disciplinarias. Además, muchos de ellos han sido traducidos a la justicia. Se le han asestado duros golpes a la corrupción policial.
9- El equipamiento de la Policía Nacional ordenado por el Presidente Dr. Leonel Fernández Reyna no tiene antecedentes históricos. Esto ha cambiado la imagen de la institución ante la ciudadanía y va modernizando la labor policial, sobre todo, en la labor preventiva y en los servicios a los barrios.
10- La mejoría del sistema de comunicaciones y tecnologías modernas ha permitido la rápida solución de actos criminales y delictivos.
11- Esta gestión policial encontró la tasa anual de homicidios en 25 por cada 100,000 habitantes (2005), logrando bajar esa tasa a 17 homicidios por cada 100,000 habitantes (2006), lo que nos sitúa por debajo de la media latinoamericana que es de 30 homicidios por cada 100,000 habitantes.
12- Otro logro de la gestión ha sido en el terreno del robo de vehículos, ya que la media de recuperación y entrega a sus legítimos dueños de los vehículos robados se mantiene en un 85%. Esto, ha permitido reducir el costo de las primas de seguros de vehículos de parte de la Cámara Dominicana de Aseguradores y Reaseguradores.
12- Esta gestión policial no tiene ningún caso criminal de importancia nacional pendiente de resolver, pues, los hechos criminales que han conmovido la conciencia nacional han quedado resueltos en breve tiempo, lo que ha enviado un claro mensaje a los delincuentes, de que no quedaran sin el castigo debido por sus actos.
El futuro inmediato del Plan de Seguridad Democrática consiste en mantener la ampliación a los barrios más necesitados de labor preventiva del delito.
En esta nueva fase del Programa Barrio Seguro se integraran los 21 barrios siguientes:
1-Villa María. 2- Villa Juana. 3- Villa Consuelo. 4- Villa Marina. 5- Los Peralejos. 6- Los Girasoles (I, II y III). 7- Las Ochocientas de los Ríos. 8- La Yagüita de Los Ríos (Los Ríos). 9- La Esperanza. 10- Los Vecinos. 11- Los Pinos (Km.11 de la Autopista Duarte). 12- Villa Francisca. 13- San Carlos 14-La Puya (Arroyo Hondo). 15- Cristo Rey. 16- La Agustinita. 17-Ensanche la Fe. 18- Ens. Kennedy. 19- Los Próceres de los Jardines (Los Jardines del Norte). 20- La Hondonada de Pantoja. 21-Las Flores (km.22 Aut. Duarte).
Para lograr estos objetivos debe mantenerse el programa de equipamiento y entrenamiento de personal, así como, la captación y entrenamiento de nuevo personal policial. Además, debe continuarse el programa de remodelación y construcción de nuevos destacamentos.
Debe desarrollarse una agresiva campaña de orientación y sensibilización de la ciudadanía, para que confíe en la institución y colabore en un mayor grado, a través de las organizaciones comunitarias en el respaldo a la labor policial.
Como una forma de revalorizar la profesión policial deben mejorarse las condiciones de vida de los agentes con aumentos selectivos de sueldos, planes de viviendas y promover un mayor uso de las facilidades que tiene el Instituto de Seguridad Social de la Policía (ISSPOL).
Continuar la lucha contra la corrupción policial a través de la Dirección Central de Asuntos Internos.
Ejecutar la captación y entrenamiento de agentes para el programa de Policía Comunitaria.
Reforzar las labores de Policía Preventiva en los cascos urbanos de las principales ciudades del país.
CUADRO #1
HOMICIDIOS EN REPÚBLICA DOMINICANA
1999-2006
AÑO 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006
MES ——– ——— ——– ——— ——– ——— ——– ———
ENERO 99 90 82 70 160 152 194 140
FEBRERO 85 69 85 70 115 163 206 163
MARZO 100 76 84 74 151 194 217 145
ABRIL 104 102 102 71 138 168 202 151
MAYO 128 71 82 111 158 183 232 160
JUNIO 109 82 78 126 154 202 212 147
JULIO 117 93 90 125 137 206 235 160
AGOSTO 70 104 93 112 156 167 206 104
SEPTIEMBRE 81 90 110 139 172 133 120 116
OCTUBRE 84 95 85 115 172 207 141 91
NOVIEMBRE 101 108 75 121 215 191 140 126
DICIEMBRE 109 119 99 108 174 276 131 127
TOTAL 1,187 1,099 1,065 1,242 1,902 2,242 2,236 1,630
TASA POR
100,000 HABS. 14.1 12.9 12.4 14.3 21.8 25.0 24.6 17.2
CUADRO #2
TASA DE HOMICIDIOS POR CADA 100,000 HABITANTES
1999-2006
1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006
1,187 1,099 1,065 1,242 1,902 2,242 2,236 1,630
14.1 12.9 12.4 14.3 21.8 25.0 24.6 17.2
CUADRO #3
VEHÍCULOS ROBADOS Y RECUPERADOS
2006
MES ROBADOS RECUPERADOS PORCIENTO
ENERO 218 217 99.5%
FEBRERO 210 168 80.0%
MARZO 274 233 85.0%
ABRIL 231 200 86.5%
MAYO 243 259 106.6%
JUNIO 148 245 165.5%
JULIO 297 241 81.1%
AGOSTO 292 272 93.1%
SEPTIEMBRE 224 158 70.5%
OCTUBRE 265 149 43.7%
NOVIEMBRE 289 162 56.0%
DICIEMBRE 266 207 77.8%
TOTAL 2,957 2,511 85.0%