SANTIAGO.-Cuando gremios periodísticos denuncian amenazas de muerte y otros vejámenes contra miembros de la prensa, un nuevo caso de atropello se registra en esta ciudad cuando un teniente de la Policía agredió, delante de un representante adjunto de la Fiscalia y oficiales, a un camarógrafo de prensa. Kelvin Yudet, más conocido ampliamente en los círculos periodísticos como Kelvin Problema, se ha convertido en la más reciente víctima de la irracionalidad al sufrir una agresión física y amenazas de muerte por parte del oficial dentro de las propias instalaciones de la Dirección Regional Cibao Central de la Policía, con sede aquí.
Yudet se desempeña como reportero del programa “Con nombre y apellido” que dirige y conduce el periodista Orlando Reyes, en el horario de 11 a 12 de la noche, por el Canal 53 de Cibao TV Club.
Reyes, al hacer públicamente la denuncia sobre el caso, explico que su camarógrafo estaba filmando y tomando unas declaraciones a un señor que llevaron herido al Departamento de Homicidios.
A un teniente que se encontraba en el área, parece que no le gusto la acción de Yudet y, sin explicaciones, le entro a trompadas y le impidió su labor en medio de amenazas de muerte y otros vejámenes.
El oficial agresor ha sido identificado por el apellido de Gutiérrez, contra el cual se querellaran este martes en la Fiscalia el periodista Orlando Reyes y el camarógrafo Kelvin Yudet.
Lamenta el productor del programa “Con nombre y apellido” que este hecho se registrara en presencia del licenciado Miguel Ramos, fiscal adjunto, y de oficiales de la institución policial, que nada hicieron por impedir la agresión.
Reyes, que también es productor del programa “Los mas pegados en noticias y comentarios” de 7 a 8 de la noche por Radio Nacional (1380 klcs AM), reclamo de los gremios de comunicadores que se pronuncien en contra de este hecho, que empaña el ejercicio periodístico.
Específicamente pide al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), filial de esta ciudad, que tome cartas en el asunto para evitar la repetición de hechos desagradables como el que acaba de registrarse con el camarógrafo Kelvin Yudet y recordó el refrán de que “hoy por mi y mañana por ti”.