Distrito Nacional.- Si como se ha determinado en el país más de un millón de haitianos han adquirido cédulas de manera fraudulenta, es algo a lo que el gobierno debe poner especial atención.
Cuando se habla de cifras con respecto a la presencia haitiana en la República Dominicana, a veces, se pudiera interpretar que quienes manejan los números con preocupación a través de los medios de comunicación, exageran, pero, por lo que se puede apreciar, no hay tal exageración.
Ello es así por el hecho de que, si realmente, como han establecido organismos oficiales, hay más de un millón de nacionales de Haití que han logrado expedir cédulas de Identidad y Electoral en el país, lo más probable es que contemos con más de un millón de ellos sin ese documento, residiendo de manera ilegal o, por lo menos, con un status irregular.
Dicen que en Guerra, comunidad de bateyes en la provincia de Monte Plata, hay una Oficialía Civil que expidió miles de actas de nacimiento fraudulentas para haitianos que no viven por esa zona. Y que tanto las cédulas como las actas de nacimiento han sido expedidas con el apoyo y la diligencia de algunas Organizaciones No Gubernamentales.
No nos oponemos a que los haitianos que viene a trabajar al país, a ganarse la vida, lo hagan. Pueden hacerlo. Ahora bien, lo que siempre reclamamos para ello es que las autoridades establezcan una política migratoria especial con relación al fenómeno haitiano, de manera que cada haitiano regularice su status en República Dominicana y que el gobierno tenga control sobre esa sitaución, porque de lo contrario…