SANTO DOMINGO.-En el marco de las actividades relacionadas con la II Feria Regional del Conocimiento titulada “Reduciendo Desastres y Preparación Comunitaria: Transfiriendo Experiencias y promoviendo la Cooperación en el Caribe”, la Universidad Autónoma de Santo Domingo celebró este jueves el Foro-Panel: Reduciendo riesgos y desastres en República Dominicana. La actividad, celebrada en el Salón de Orientación de la Biblioteca Pedro Mir, contó con la participación de los representantes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Comisión Europea, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Ricardo Zapata, experto en evaluación post desastre, Ángeles Arenas, también representante del Banco Central de Puerto Rico e Indira de Jesús, del Instituto Tecnológico (INTEC) y la Organización de los Derechos Humanos.
El Foro se inició con la ponencia de Ángeles Arenas, titulada “Reducción de Riesgos a Desastres: Un desafío para el Desarrollo”, durante la cual resaltó que en los últimos diez años 307 millones 948 mil 429 personas han resultado afectadas de manera directa por algún tipo de desastre, y otras 336 mil 540 han perdido la vida.
Indicó, que entre 1975-2005, el número de desastres ha aumentado cinco veces, y el impacto económico por año, en el mismo período, se incrementó de 10 a 152 millones de dólares.
Asimismo, reveló que América latina y el Caribe constituyen la segunda región del mundo más afectada por desastres meteorológicos, con mil 309 desastres en los años comprendidos entre 1990-1999.
También advirtió que las pérdidas económicas por los mismos ponen en peligro el desarrollo sostenible y los logros de los objetivos del milenio en muchos países.
De su lado, el experto en evaluación post desastre, Ricardo Zapata, quien abordó el tema: “El Costo de un Desastre”, aseguró que los mismos son un problema de desarrollo, debido a la carencia de una visión integral y sistémica del impacto de los desastres en los aspectos humanos, sociales, los lazos sociales y los problemas de violencia y de seguridad que existe en la comunidad y que con las catástrofes se ven agravados.
Destacó que los efectos de un desastre arrastran hacia abajo los indicadores de desarrollo de los países que resulten afectados, debido a los costos económicos, sociales, ambientales y de oportunidades de los recursos que se deben destinar a la recuperación de infraestructura, medios de vida y capacidad reproductiva.
“Ese costo de oportunidad de los desastres es un factor fundamental que no se ha tomado en cuenta. El costo político, un gobierno que puede caer porque no ha gestionado bien un desastre, un sistema político que puede ver cuestionada su legitimidad porque no maneja adecuadamente los desastres”, señaló.
Zapata informó que existe también un efecto dinámico que tiene que ver como los desastres impactan de una manera sustancial la evolución progresiva y en el tiempo de las variables sociales y económicas que afectan, y se relacionan con los factores de competitividad, equidad, sustentabilidad, seguridad y de derechos individuales y sociales.