SANTO DOMINGO. -“La chica dorada” regresa al país. Esta vez, Paulina Rubio presentará su concierto “Amor, luz y sonido” el 29 de marzo en el Palacio de los Deportes del Distrito Nacional.
La estrella mexicana incluyó a la República Dominicana en su nueva gira mundial gracias a la negociación con la empresa Bravo Entertainment que dirige el empresario Gamal Haché.
La intérprete de “Ni una sola palabra”, “Maldito amor” y otros éxitos realiza se encuentra en una posición cimera en el gusto de sus seguidores. Su más reciente disco “Ananda” que estrenó el pasado año le ha permitido seguir creciendo en en América Latina, Europa y Estados Unidos.
Paulina es símbolo de fuerza de cambio: una chica vibrante e impredecible. Un dínamo de energía y sensualidad. Auténtica en todo lo que se propone. Su estilo y su música se han conjugado durante las últimas dos décadas para seducir y conectar con todo tipo de públicos.
Más que valiente, es considerada como una artista atrevida e irreverente, que propone y defiende sus posturas. Icono de las mujeres de su generación, sus temas se convierten en tratados de libertad y pasión. No obstante, Paulina no se encasilla ni entra en batalla de sexos ni posturas… es adorada igualmente por hombres que por mujeres de todas las edades y su música está dedicada a la paz, al amor y a las situaciones cotidianas de los mortales.
"Y eso me encanta!!", confiesa. "Hay que dejar atrás los estereotipos. Hay que gritar a los cuatro vientos que somos latinos con orgullo, hay que esforzarnos por hacer un trabajo auténtico que conecte y prevalezca. Mi fusión es ineludible… soy una mujer romántica y fuerte a la vez. Mi alma es mexicana, pero pertenezco al mundo y ese mundo me bautiza con vivencias y sabores que se hacen presentes en mi música".
Un color de voz inconfundible que es ya marca de éxito en todo Iberoamérica. Desde su natal México y Estados Unidos hasta España, país que le ha acogido con los brazos abiertos. Con su música como único estandarte, Paulina se ha convertido en la chica dorada del pop en español. “Para mí , la música es como el amor, besas a alguien para dar y recibir una energía, una conexión. Es el hilo conductor de todo y yo estoy tratando de conectar con esa gente que vibre en mi mismo canal” , confiesa la artista.
Paulina es hija de una de las más célebres estrellas cinematográficas de México, Susana Dosamantes. Criada entre México, Los Ángeles y España, su espíritu independiente fue casi innato. “Mi madre tuvo que filmar muchas películas en Europa, así que teníamos que viajar con ella por todo el mundo rodeados de escritores, arquitectos, cantantes, cineastas…- nos cuenta Paulina – Fue interesante dar mis primeros pasos entre adultos. Eso me hizo sentirme muy cómoda en libertad, y fue entonces cuando a la edad de 7 u 8 años comencé a tomar mis propias decisiones”. La primera decisión personal que la encaminó a la fama fue comenzar a estudiar canto y danza. Con apenas 10 años, el brillo y seguridad de Paulina era tan evidentes que fue elegida para formar parte de grupo infantil Timbiriche.
Después de pasar casi una década como parte del grupo, llega su álbum en solitario La Chica Dorada. Después vendrían sus discos 24 Kilates, El Tiempo es Oro y Planeta Paulina.
En el 2000, Paulina Rubio llega con el disco Paulina, que la consagró como una de las estrellas internacionales más importantes en la música Latina y reina del Pop Latino, al vender más de tres millones de copias mundialmente. Desde su lanzamiento en mayo del 2000, el disco logró colocar varios sencillos en el primer lugar incluyendo: ‘Lo haré por ti,’ ‘El último adiós,’ ‘Y yo sigo aquí’ y ‘Yo no soy esa mujer.’ Este disco recibió el premio de Álbum Latino del Año 2001, otorgado por la Revista Billboard; Mejor Álbum Pop y Mejor Artista Pop Femenina en los Premios Lo Nuestro a la Música Latina, 2001; así como tres nominaciones a los Premios GRAMMY Latino del 2001.
Las extraordinarias ventas le dieron: TRES DISCOS DE PLATINO y DISCO DE DIAMANTE en México, DOBLE DISCO DE ORO y DISCO DE PLATINO en Estados Unidos, DISCO DE ORO y PLATINO en Colombia, DISCO DE PLATINO en Chile y DISCOS DE ORO en Perú, Ecuador y Venezuela.
PAULINA también cautivó al público en Italia y España, donde recibió DOBLE DISCO DE ORO y los prestigiosos PREMIOS ONDA y AMIGO como Mejor Artista Femenina del año 2001.
Poco después, con su debut en inglés, vence las barreras idioma para darse a conocer en el mercado anglosajón . Con temas que fusionaron alternativamente el rock, pop y el dance con ritmos tradicionales mexicanos, Border Girl muestra todas las influencias que Paulina ha recibido durante toda su vida. R&B, guitarras flamencas, mariachi y la pasión de un corazón latino para llegar a un publico heterogéneo.
Su más reciente producción no fue la excepción. Pau-Latina nos trajo a una artista camaleónicamente evolucionada. Más madura en todos los sentidos, pero igualmente de visionaria. "Este disco fue como una radiografía de mi crecimiento, de mis estados de ánimo y mi filosofía del vida". Orgullosa de su tierra y sus raíces , Paulina logró una vez más esa acertada fusión que mezcla el folklore internacional con los ritmos más modernos. "Pau-Latina fue un taller de música, entre muchos amigos que entendieron mi mensaje. Aportaron sus ideas y salimos adelante con temas maravillosos como Te Quise Tanto de Coti, la carta de presentación del álbum que la colocó #1 uno por varias semanas en toda Iberoamérica.
Pau-Latina trajo consigo otros grandes éxitos que también escalaron hasta el tope de las listas consagrándola como La artista más vendedora de Latinoamérica en el 2004. De la mano de temas como Algo Tienes, Dame otro tequila y Mía, Paulina se colocó como la favorita, obteniendo numerosas nominaciones y merecidos galardones en Premios Juventud, Premios de la Gente, Premios Tu Música, Premio Lo Nuestro, y los Premios Billboard de la Música Latina -sin contar que fue la única mujer nominada al Grammy en su Edición No. 47- en la Categoría Best Latin Pop Album por PAU-LATINA
La aventura de ésta polifacética figura concluyó en el 2005 con una gira extensa de Pau-Latina por México, Centro y Sudamérica y, finalmente con 24 fechas de costa a costa en la Nación Americana. "Esta fue la etapa más divertida de todas y eso que se nos quedaron algunos países y ciudades por visitar – añade. La sensación de tener tu banda y de cantar en un auditorio distinto cada noche es incomparable. Todo se lo debo a mis fans, que noche a noche estuvieron ahí para cantar y pasarla bien con nosotros. Crecí haciendo conciertos y voy a morir también cantando -afirma Paulina. Es un sentimiento más fuerte que yo… el motor donde recargo mi adrenalina”.
"Pero eso sí!!!! Lo mejor está aún por venir. No me siento cansada para nada, por el contrario, tengo más ganas que nunca de salir y presentar mis nuevas propuestas. Creo que todos, como el buen vino, vamos mejorando, conociendo cada vez más nuestras virtudes y defectos… Los nuevos discos que estoy preparando ahora, uno en español y otro en inglés me están haciendo mucha ilusión", admite.