SANTO DOMINGO.-La bibliografía musical dominicana amplía su oferta desde hoy con la publicación de la segunda edición del Anuario Discos correspondiente al año pasado y que recoge los hechos más importantes en ese renglón ocurridos durante el 2005. En sus ochenta y ocho páginas, el Anuario Discos 2006 reúne la discografía (merengue, bachata, salsa, típico, rock, pop y reggaetón) estrenadas por los artistas nacionales, así como también reseñas de los principales videoclips filmados en el referido período, información sobre los artistas debutantes y los libros especializados en música que llegaron a las librerías.
Máximo Jiménez, director de la publicación, señaló que “esta edición es una referencia bibliográfica obligada para el lector que busca información concisa y precisa sobre el comportamiento de la industria musical dominicana, porque el Anuario Discos se encarga de compilar durante todo un año los acontecimientos más importantes en esa materia”.
La edición 2006, de esta revista única en su género en el país y que se publicó por vez primera en el 2005 fundada por Jiménez, actual editor de Arte y Espectáculos del periódico El Caribe y la periodista Emelyn Baldera, reportera de espectáculos de Listín Diario y actual tesorera de la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte), también trae amplios reportajes sobre el comportamiento de los géneros musicales escritos por periodistas reconocidos en la materia.
Limay González, ex editora de arte y espectáculos del periódico El Caribe, colabora con “El merengue: un ritmo centenario que cobró protagonismo en el 2005”, mientras Alfonso Quiñones, editor de Revista de Diario Libre, analiza uno de los eventos anuales que reúne a los principales intérpretes del ritmo nacional en “El merengazo, un evento que cobra fuerza y gana espacio”.
José Rafael Lantigua, secretario de Estado de Cultura, ofrece su interesante introducción a “El bolero: visiones y perfiles de una pasión dominicana”, libro sobre el referido género musical editado como parte de la Colección Verizon.
El director de la publicación, a su vez, aporta su visión con respecto a la celebración del primer Congreso Internacional Música, Identidad y Cultura en el Caribe, que se llevó a cabo en abril del 2005 en el Centro León de Santiago. La periodista Grisbel Medina hace un análisis sobre los hechos más sobresalientes en torno a lo que sucedió en el merengue típico.
Samir Saba, periodista conocedor del rock dominicano, colabora con un exhaustivo artículo en el que presenta a las bandas más relevantes del ritmo en el 2005. La bachata y la labor de los intérpretes solistas, son tratados en sendos reportajes escritos por Máximo Jiménez y Limay González, respectivamente.
El lector también encontrará en el Anuario Discos 2006 reseñas sobre las premiaciones nacionales e internacionales más importantes que cada año galardonan a los artistas más populares: El Casandra, Lo Nuestro, Billboard y Grammy en sus ediciones latinas y el ASCAP.
Una breve sección dedicada a las páginas en internet de contenido dominicano y dos reseñas en el apartado Hasta siempre que recogen información sobre los artistas fallecidos en el 2005 –el pianista y arreglista Bertico Sosa y el compositor Máximo Polanco Estrella, fundador de los Premios El Dorado- cierran el invaluable contenido de esta publicación que los periodistas han bautizado como “la memoria musical dominicana”.
El Anuario Discos, que tiene un precio de RD$200 y puede ser adquirido en las principales librerías de Santo Domingo, mantiene el formato revista, que sale al mercado con una edición a cargo de su director, impresa en papel satinado y color en todas sus páginas.