SANTO DOMINGO.-El Gobierno dominicano previó el impacto del DR-CAFTA en las estimaciones de los ingresos tributarios del año 2007, aseguró el secretario de Hacienda, licenciado Vicente Bengoa, quien los estimo en 6 mil 200 millones de pesos.
“Pero eso fue previsto, por lo que no habrá problemas por esa causa”, dijo Bengoa.
Bengoa explicó que esas pérdidas en las recaudaciones corresponden a 4 mil 200 millones por arancel y otros 2 mil millones a los ingresos derivados de las 2,903 líneas arancelarias que la ley 557-06 reduce a tasa cero en su artículo 24.
Este último renglón, indicó, corresponde a materias primas, insumos y maquinarias “que se espera fomenten la competitividad” y fueron excluidos “como parte de los compromisos asumidos por el gobierno con los empresarios en el 2005”.
Asimismo, el secretario de Hacienda expresó que “el efecto del DR-CAFTA debería comenzar a reflejarse rápidamente en los precios de los vehículos, aunque en proporciones distintas dependiendo de la clasificación de los mismos”.
Refirió que en el arancel dominicano existen unas 99 líneas arancelarias en las que se clasifican los automotores atendiendo al cilindraje, el funcionamiento del motor y el tipo de vehículo, “para las cuales fueron negociados diferentes períodos de desgravación”, de entre 4, 5 y 10 años. En ese sentido, informó que 15 de esas líneas a 8 dígitos se van a desgravar inmediatamente; “es decir que pagarán cero arancel”, añadió.
Bengoa dijo que en esa situación están los camiones cisternas, los que son frigoríficos a la vez, los denominados volquetas, los que sirven para la recogida de basura, para perforación, los barredores, regadores y de limpieza de vía pública, así como las ambulancias, carros fúnebres y camiones de bomberos.
En ese grupo para desgravación inmediata se incluyeron, además, 2 líneas de vehículos con cilindraje entre mil y mil 500 centímetros cúbicos, “aún cuando conviene indicar que la producción automovilística norteamericana consiste en carros de alto cilindraje”.
El secretario Bengoa aclaró que la reducción en el arancel no se aplicará a los vehículos que procedan de los Estados Unidos, “sino a aquellos que cumplan con la regla de origen”.
De acuerdo a esta regla, el 35 por ciento del costo neto del vehículo deberá ser de los Estados Unidos, República Dominicana o alguno de los países centroamericanos signatarios del tratado.
Respecto a los repuestos se negociaron 88 líneas arancelarias, 32 de las que entrarían inmediatamente en tasa cero, incluyendo los chasis de todo tipo. Los parachoques, cinturones de seguridad, vidrios, frenos, partes eléctricas, ejes con diferencial, amortiguadores, etc. se desgravarían 5 años.
“Al igual que en el caso de los automóviles, debido al retraso del DR-CAFTA de un año, deberían de reducir su arancel en 40 por ciento, mientras otras piezas a ser desgravadas a 10 años reducirían su arancel en 20 por ciento” apuntó el funcionario.
DTG