SANTIAGO.- Delio Gómez Ochoa, el cubano que acompañó a los héroes y mártires que llegaron al país en 1959 para combatir con las armas en las manos la cruenta y oprobiosa dictadura de Rafael Trujillo Molina, tendrá en breve su calle en esta ciudad. La Sala Capitular, en su más reciente sesión, aprobó la designación de una vía con el nombre del legendario combatiente antitrujillista, en una iniciativa que tuvo mucho que ver el síndico José Enrique Sued Sem.
Está ubicada esta calle en el Reparto Ricardo –Tito- Hernández, por las inmediaciones de donde vive el reconocido pelotero Tony Peña. Específicamente es la calle Primera de ese sector, la cual conecta con la avenida Juan Pablo Duarte.
Gómez Ochoa fue uno de los escasos sobrevivientes de aquella pléyade de hombres y mujeres que, a cambio de nada, llegó por las costas dominicanas para liberar al país de las garras de la sangrienta dictadura.
Por su gesto de integrarse a la expedición liberadora, aún sin correr por sus venas sangre dominicana, Gómez Ochoa se ganó el título de Héroe Nacional y tanto ha sido su amor por estas tierras que hasta se ha quedado residiendo aquí.
Pablito Mirabal, uno de los más jóvenes de la expedición, y Delio fueron los dos cubanos que participaron en la gesta en el grupo que estaba bajo la dirección del intrépido y aguerrido Comandante Enrique Jiménez Moya.
EL SINDICO
El síndico Sued Sem acogió con beneplácito esta iniciativa, la cual recibió el impulso necesario de los regidores de los diferentes bloques que inciden en la Sala Capitular de Santiago.
“Estamos satisfechos porque se está rindiendo honor a quien honor merece”, dijo el Ejecutivo Municipal, tras recordar las palabras del apóstol cubano José Martí de que “honrar, honra”.
La calle quedará oficialmente designada con el nombre del héroe cubano durante un acto que se prepara al efecto y cuya fecha será anunciada oportunamente, dijo Sued.
Gómez Ochoa será invitado formalmente para que esté presente en esta ceremonia. Con la designacion de esta calle, se eterniza el nombre de este singular cubano que no tomo en cuenta riesgos ni peligros para integrarse de manera decidida a los dominicanos que intentaron liberarnos del yugo trujillista el 14 de junio de 1959.
De inmediato no consiguieron su propósito, pero es indiscutible que su ejemplo sirvió para encender las llamas que más tarde arrasarían de una vez y para siempre con la dictadura que sembró de muerte, luto y dolor al país durante 31 largos años.
