El Museo de la Familia Dominicana, como parte de su proyecto enfocado a rescatar valores y tradiciones de nuestras familias, presenta por segunda ocasión la actividad “Dulces de Cuaresma”, la cual se inaugura el jueves 29 de marzo y permanecerá hasta el 1ro de abril, en horario de 9:00 de la mañana a 6:00 de la tarde.
Eva Camilo, la directora del museo explicó que “Dulces de Cuaresma” es una exposición y degustación de dulces, que tiene como finalidad cumplir con uno de nuestros grandes objetivos, hacer honor a las tradiciones de la familia dominicana, esta vez en el tiempo de Cuaresma, reuniendo los dulces que usualmente se disfrutan durante la época Santa”.
Durante la exposición los visitantes podrán conocer un poco sobre el origen e historia de nuestros dulces, así como del significado de la Cuaresma y los cambios que se experimentan en los hábitos alimenticios durante la misma.
La Cuaresma es un período de entrenamiento espiritual en el que además de la gran variedad de platos salados que acompañan la mesa familiar dominicana, se encuentra un grupo de platos dulces que sólo durante estos días la gente se dispone a preparar y degustar.
El país cuenta con una rica y multifacético cultura culinaria, que se ha ido macerando a través de la historia y se ha visto influenciada por las raíces aborígenes de nuestra cultura, por las corrientes traídas de la Madre Patria, las tendencias africanas y otras tantas vertientes que llegan a nuestra cocina.
Acerca de la historia de estas dulces costumbres podemos decir, que tanto el maíz, como la yuca y la batata, fueron alimentos básicos de los taínos, mientras que de las habichuelas y sobre todo con dulce, encontramos un origen francés, quienes la introducen como frijolillos, siendo para justo después de nuestra Independencia , en 1844, cuando son fusionadas con una serie de ingredientes que dan como resultado nuestras “Habichuelas con dulce” únicas en el mundo y de las que se dice que el comerlas es disfrutar del sabor de la Patria y de la esencia de la cultura dominicana.
Ubicado en la Casa de Tostado, calle Padre Billini, esquina Arzobispo Meriño, Ciudad Colonial, el Museo de La familia Dominicana, aloja la más importante colección de arte decorativo reflejando los estilos de vida del siglo XIX Y XX en nuestro país. Actualmente se encuentra comprometido en ofrecer una variada y rica programación cultural que permita una identificación de los dominicanos con el mismo, a través del interés por reafirmar y revivir nuestros valores.