SANTO DOMINGO.-El presidente de la Comisión Pastoral de Ecología y Medio Ambiente afirmó que aun en los días de Semana Santa la naturaleza tiene derecho a no ser sacrificada, como se hizo hace más de dos mil años con Jesucristo.
Monseñor Fabio Mamerto Rivas manifestó que en estos días la gente se mueve mucho de un lado a otro y en algunos casos no repara en el daño que puede producir a la naturaleza que Dios mismo creó.
“En estos días en que se habla tanto de medioambiente y de ecología, es importante que ese aspecto sea dejado como punto de reflexión, en familia con amigos, que de verdad nuestra naturaleza no sea también crucificada”, señaló.
El obispo emérito llamó a la gente sensata de la población, a quienes tienen amor a la patria, a cuidar la vegetación, el hábitat, los recursos naturales, como un regalo de Dios para todos.
Recientemente, el prelado denunció que algunas autoridades aprovechan la falta de recursos en la Secretaría de Medio Ambiente para hacer “algunos negocios” y estimó que en este manejo y en otros “se necesita cierta macana aplicada con discreción, pero con decisión”.
Mamerto Rivas dijo desconocer que pasa en los gobiernos para ofrecer atención a Medio Ambiente, porque la gente se queja de los funcionarios, debido a que no tienen recursos y a veces tampoco combustible para moverse en los vehículos a realizar el trabajo correspondiente.
Al hablar en el programa “EN POCOS MINUTOS”, que produce por el canal 45 de 11:00 de la mañana a 12:00 del mediodía, indicó que desde el Domingo de Ramos, que marca el inicio de la Semana Santa, los católicos y todos los cristianos en general, deben involucrarse con alegría en la celebración y dar gracias a Dios el Padre por su hijo Jesús.
Resaltó que la semana mayor nos invita a la meditación, y que aunque haya compromisos familiares y de otra índole, se debe dar prioridad a las actividades de la fe.
Criticó el hecho de que en muchos lugares no queda ni el olor de la Semana Santa, porque dedican estos días a festividades muy alejadas de la realidad que reseñan las sagradas escrituras sobre la pasión, muerte y resurrección de Cristo.
Valoró a la feligresía que no presta atención a quienes rechazan esta celebración, porque la satisfacción es mayor cuando esas mismas personas que eran contrarias, luego piden excusas y se reconcilian con Dios.
“Recuerden que había judíos recalcitrantes, judíos liberales, y la gente que seguía a Jesús, y eso se repite históricamente, pero lo más importante es que aprovechemos la oportunidad para hablar a otros del plan de salvación del Señor que tenía que cumplirse, tal y como se cumplió”, sostuvo.
Mamerto Rivas destacó los preparativos de la iglesia católica para la jornada religiosa, la cual incluye vía crucis, oraciones en la casa, ayunos, penitencias, entregas especiales, servicios especiales, entre otras actividades.
Además, expresó su admiración por los jóvenes voluntarios que laboran en la Defensa Civil, quienes dejan de lado sus actividades normales para estar en trabajo preventivo en las carreteras, con sus banderas y alertando para evitar accidentes.
“Y yo creo que el pueblo va respondiendo, cada día tenemos menos muertos, las víctimas pueden ser por imprudencias en las autopistas, por exceso de alcohol, por riñas que se van de palabras y terminan con los puños, el cuchillo o la pistola”, apuntó.
Exhortó a la ciudadanía a tratar de amortiguar los efectos de ese tipo de conducta anti-social y anti-natura, que se propicia en estos espacios y empañan el objetivo de la celebración.
En otro orden, Monseñor Mamerto Rivas explicó que el sábado santo que se aproxima será el día de la Fiesta de la Luz, en la cual se prepara a los niños y aun adultos, para el bautismo, la confirmación y la primera comunión.
Agregó que, en la noche de pascua y de la resurrección, en muchas parroquias y comunidades es un momento especial en que muchos son introducidos en la iglesia a través del bautismo.
En cuanto al aspecto económico, advirtió que se debe ser prudente con los gastos, porque en reiteradas ocasiones la gente utiliza sus ahorros y más aun toma prestado para irse de vacaciones y luego retorna con los bolsillos vacíos a tener que enfrentar los compromisos ineludibles de la sociedad.
Consideró que es mucho mejor asistir a los actos religiosos que han sido preparados para toda esta semana, con la familia, en armonía y en paz, sin el riesgo de incidentes lamentables ni de gastos innecesarios.