REUTERS/Fairfac County Public Schools) Los medios estadounidenses recogen testimonios de profesores, vecinos, compañeros y fuentes de la investigación. Lo describen como "solitario", "agitado" o "muy tranquilo".
Colocaba a las víctimas en fila, les preguntaba: ¿Usted sabe dónde está mi novia? y disparaba, según un testigo latinoamericano.
Compró una de las armas en una armería cercana a la universidad que estaba de rebajas.
Una nota contra "niños ricos" dejada en su habitación centra parte de las pesquisas.
"Me habéis provocado a hacer esto", decía la nota.
Los medios estadounidenses se han lanzado a la especulación poco después de conocer la identidad del autor de la mayor masacre de EE.UU en un centro educativo.
Lo que queda claro es que Cho Seung – Hui tenía 23 años y era un estudiante surcoreano de literatura inglesa en la universidad de Virginia Tech, escenario el lunes de la masacre.
"¿Dónde está mi novia?"… y disparaba
Estudiantes latinoamericanos han revelado a medios de prensa de sus países detalles desconocidos de la matanza en la Universidad Politécnica de Virginia, como el hecho de que el asesino preguntase a algunas de sus víctimas antes de disparar si sabían dónde estaba su novia.
"Les puso en línea y les preguntaba: ¿usted sabe dónde está mi novia? Luego les disparaba", contó a Radio W Sebastián Hoyos, un colombiano que se dirigía a clase cuando comenzó en el centro conocido como Virginia Tech la peor matanza registrada hasta ahora en una universidad de EE.UU.
Entre los 32 fallecidos se encontraban dos latinoamericanos, un peruano y un puertorriqueño.
Un solitario, un agitado y un joven tranquilo
"Era un solitario y estamos teniendo dificultades para encontrar información sobre él", ha asegurado Larry Hincker, portavoz del centro educativo.
Era un solitario y estamos teniendo dificultades para encontrar información sobre él
Sin embargo el Chicago Tribune asegura que el estudiante de 23 años ya había protagonizado algunos incidentes: "Cho había mostrado recientemente signos de violencia, un comportamiento aberrante, según las fuentes de la investigaciones, incluyendo prender fuego a un dormitorio y un supuesto acoso a mujeres."
Ese mismo periódico recoge el testimonio de una profesora que asegura que el asesino era una persona "agitada", mientras un vecino, Abdul Shash, lo describe como una "persona muy tranquila, introvertida", al que le gustaba jugar al baloncesto.
"Hacíamos bromas en clase sobre su trabajo, porque era muy novelesco, muy surrealista, teníamos que reírnos", declaraba a College Media Stephanie Derry, una compañera de Cho en las clases de escritura.
Ante estas bromas, estas risas, Cho Seung – Hui guardaba silencio, y nunca quería comentar en público su trabajo: "No recuerdo haberle oído una sola palabra en todo el trimestre", añadía Derry.
Fuentes policiales citadas por esta misma publicación no descartaron que Cho Seung -Hui estuviera tomando algún tipo de medicación para la depresión.
Del entorno familiar poco ha trascendido; se asegura que Cho Seung-Hui llegó en el año 92 a Detroit, y que poco después se trasladó a Centreville, Virginia, un barrio residencial de Washington, donde su familia regenta una lavandería.
Su hermana, según fuentes de la investigación citada por medios estadounidenses, está estudiando en la prestigiosa universidad de Princeton.