SANTO DOMINGO.- Dos miembros de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) resultaron heridos ayer al ser atacado a tiros, botellazos y pedradas durante un operativo que realizaban en un barrio de Santiago, agresión que los agentes repelieron, resultando con un balazo un reincidente distribuidor de narcóticos, al que le fue ocupada una gran cantidad de porciones de cocaína, crack y marihuana.
Los agentes fueron agredidos en el barrio Loma de la Tayota de Pastor, en el sector Bella Vista, ataque del que un fiscal adjunto que acompañaba a los miembros del organismo salió ileso. Es el segundo ataque sangriento que se produce en Santiago contra la DNCD en los últimos días, pero “gracias a la prudencia con que actúan nuestros hombres la situación no ha sido peor”, dijo el mayor general Rafael Radhamés Ramírez Ferreira.
El delincuente herido fue identificado como Rodolfo Amadeo Almonte Hernández, quien recibió un balazo en el glúteo derecho, con orifico de entrada y salida, mientras un sargento mayor y de la Fuerza Aérea Dominicana, adscrito a la DNCD, y un asimilando recibieron heridas de consideración, aunque fueron curados y despachados en el Hospital José María Cabral y Báez. Los agentes no se identifican por razones de seguridad.
A Almnte Hernández, un reincidente que estaba en libertad mediante garantía económica, también por caso de drogas, operaba un punto de venta de estupefacientes en el citado sector donde fue sorprendido junto a otros delincuentes que lograron escapar. Les fueron ocupadas, además, una balanza marca Tanita y objetos empleados en la manipulación de narcóticos, entre ellos tijeras y papel para envolver marihuana.
Otro de los dueños del punto de drogas fue identificado como Nelson, quien logró escapar, de quien el jefe de la DNCD dijo que “anda armado y le exhortamos que se entregue para ponerlo a disposición de la justicia”. Ramírez Ferreira volvió a advertir a los narcotraficantes que cesen las agresiones “contra la DNCD, porque de lo contrario les va a ir mal en lo adelante, es decir nuestros hombres no se van a dejar matar”.
Sin embargo, el oficial ratificó que la prudencia se impone en la agencia antidrogas, “y quizás por eso las cosas son diferentes, pero la copa se está colmando”, tras indicar que “los antisociales que nos agraden de ninguna manera nos van a amedrentar”. El funcionario habló por intermedio de su vocero, el periodista Roberto Lebrón, quien recordó que con esta última agresión de Santiago se elevan a 118 los ataques, en 9 meses.
El distribuidor de drogas está recluido en Hospital Cabral y Báez, pero inmediatamente se recupere será entregado al Ministerio Público para que sea sometido a la justicia por violar la Ley 50-88, Sobre Drogas y Sustancias Controladas, además de presentarle cargos por tentativa de homicidio. Sus cómplices son perseguidos para también ponerlos a disposición del fiscal de Santiago.
22 de abril, 2007.-