Anuncian actividad por sanidad del medio ambiente en San Francisco de Macorís

SANTIAGO.- La diócesis de San Francisco de Macorís y la Universidad Católica Nordestana auspiciarán, el próximo domingo, el Día del Aire Limpio, Vida Sana, que consistirá en apagar todo tipo de motor durante ese esa fecha. Detalles sobre la actividad, que tendrá lugar en esa ciudad, fueron ofrecidos en el transcurso de un encuentro con comunicadores, celebrado ayer en la Casa del Periodista, de aquí.

Datos sobre el particular fueron ofrecidos por Esperanza Pichardo, directora de dicho proyecto, quien estuvo acompañada en la rueda de prensa por Luís Esmurdoc, vicerrector de la mencionada universidad; el padre Jesús María Baré, coordinador de la jornada y Sonia María María, encargada de deportes de ese centro de estudios.

Presente estuvo, también, el empresario santiaguense Manuel Arsenio Ureña, a quien le dedicarán la jornada, por ser uno de los principales defensores, a nivel nacional, del medio ambiente.

Destacó Pichardo que, además de las instituciones mencionadas, un gran número de entidades gubernamentales, sociales, culturales y religiosas de San Francisco de Macorís, promueven la actividad, que se llevará a cabo por quinto año consecutivo.

Para justificar la realización el domingo de la jornada en contra de la contaminación ambiental, recordó que la concentración de vehículos de motor en marcha “es cada vez mayor en nuestros pueblos, provocando emisiones de dióxido y monóxido de carbono, produciendo el 40 por ciento de esos gases”.

“Estos gases, junto a las calderas industriales y las calefacciones, son los responsables del aumento de la temperatura de la tierra, contribuyendo a la aparición del efecto invernadero, originando el cambio climático”, abundó Pichardo.

A juicio de la ambientalista francomacorisana, de continuar desarrollándose la contaminación ambiental, el aumento de la temperatura afectará de una manera considerable el ecosistema y, por consiguiente, provocará la extinción de muchas especies que no resistirían el cambio.

Adelantó Pichardo que “los seres humanos experimentaremos cambios drásticos, especialmente los niños y los ancianos, y también nos veremos afectados por la disminución de los alimentos y el crecimiento poblacional por otro”.