SANTO DOMINGO.- La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) comunicó esta mañana que el agente asesinado anoche en presencia de su familia, incluidos sus tres hijos de ocho, siete y un año de edad, estaba asignado al Departamento de Fiscales en la agencia antinarcóticos, mientras la Policía poco después del hecho a un hombre, herido de bala en un pie, que presenta rasgos iguales a uno de los que emboscaron al militar.
El sargento Fernando Vásquez Jorge, del Ejército Nacional, fue asesinado por dos sujetos que lo seguían en una motocicleta, cuando transitaba por la Avenida Sol Poniente esquina H-5, en Arroyo Hondo II, mientras el sub-oficial conducía su vehículo, acompañado de su esposa e hijos, una hermana y una sobrina. La mujer del alistado, Natividad Figueroa, recibió varias heridas de bala durante el ataque, las que le mantienen en estado delicado.
El portavoz de la DNCD, Roberto Lebrón, dijo que los autores del hecho le hicieron alto al soldado y este accedió a detenerse, en vista de que sus asesinos se identificaron como miembros de la Policía. Vásquez Jorge fue atacado sin mediar palabras cuando procedía a salir del automóvil, cayendo mortalmente herido en el pavimento. Miembros de la DNCD investigan el caso junto a la Policía.
Sin embargo, anoche mismo oficiales del Departamento de Investigación de Homicidios arrestaron el sospechoso Higinio Francisco Custodio Mejía, de 31 añosa, quien se presentó al hospital Luis Eduardo Aybar con una herida de bala en el tobillo izquierdo. La mujer del occiso recibió tres disparos, uno que le fracturó el antebrazo izquierdo, otra en el muslo izquierdo y una el hemitorax izquierdo.
Los restos del sargento fueron trasladados al Instituto Nacional de Patología Forense para los fines de rigor. El agente antidrogas, de 32 años, era nativo de Cotuí, pero residía en la calle Jalisco número 125 del sector Simón Bolívar. El vocero del mayor general Rafael Radhamés Ramírez Ferreira, presidente de la DNCD, a nombre de quien habló, dijo que sus características “ese crimen parece que fue cometido por el narcotráfico”.
El hecho ocurrió a las 6:00 de la tarde de este domingo, en plena claridad. “Nosotros en la DNCD no descartamos nada, porque la actitud asumida por los narcotraficantes en los últimos meses es de violencia extrema. La situación es de tal magnitud que en los últimos meses las agresiones superan las 123. Que ataquen a tiros a una persona acompañada de niños solo puede provenir de sujetos de la peor calaña”, dijo.
Sin embargo, el mayor general Ramírez Ferreira -agregó Lebrón- tiene bien claro que “nuestros hombres no variarán un centímetro en esta tarea de darle de manera frontal a los jefes de puntos de drogas en los barrios de la Capital y ciudades del interior”, a los fines de que estos delincuentes sean llevados a la cárcel “o al lugar que ellos decidan, si persisten esos ataques despiadados contra los miembros de la DNCD”.
El militar era acompañado, además de su esposa Natividad Figueroa, por su hermana Cleotilde Rosario Vásquez, su sobrina Joseline Rosario Vásquez, de 14 años; así como por sus hijos María Fernanda Vásquez, de 9 años; Nairobi, de 8 años; y Critian Anthony Vásquez, de 7 años; y vanesa Céspedes, de apenas un año.
La esposa del oficial, a pesar de estar herida de gravedad, narró a los investigadores como eran perseguidos por los dos sujetos, a bordo de una motocicleta Yamaha RX-125. La señora Figueroa está internada en el Hospital Central de las Fuerzas Armadas, de acuerdo al reporte suministrado por el portavoz de la agencia antidrogas.