El controvertido presidente de la entidad "imploró" a la junta directiva que lo mantenga en su cargo ya que su expulsión afectaría significativamente su vida y la imagen de la Institución a los ojos del mundo. El órgano directivo hará pública antes del jueves una declaración en la que podría pedir a Wolfowitz que dimita, expresar un voto de no confianza o adoptar alguna medida para reprenderlo.
Wolfowitz, "suplicó" este martes a la junta directiva de la institución que lo mantenga en su cargo, y prometió realizar cambios en sus métodos de gerencia, según la transcripción de la audiencia.
"Le suplico a cada uno de ustedes que sea justo a la hora de tomar su decisión porque ella afectará no solamente mi vida sino también la forma como la institución es considerada en Estados Unidos y en el mundo", declaró Wolfowitz ante el consejo administrador reunido para discutir las acusaciones de nepotismo en su contra.
"Temo que la manera como sea conducida la investigación pueda suponer un error mayor a largo plazo para la institución que las pretendidas acusaciones de falta de ética que fueron, en realidad, resueltas hace más de un año", agregó.
Wolfowitz, quien preside el Banco Mundial desde junio de 2005, reconoció que se descansó demasiado en sus asesores personales y prometió a partir de ahora generar cambios en las formas de gestión.
Además, sostuvo que los aumentos de salario resueltos a pedido suyo para su compañera sentimental Shaha Riza, también empleada del Banco Mundial, habían sido parte de un acuerdo "razonable".
Informes negativos
Los integrantes del Consejo recibieron a última hora del lunes una copia del informe elaborado por una comisión especial designada para investigar el caso, que concluye que el presidente del Banco Mundial, Paul Wolfowitz, violó las normas de esa institución al otorgar un trato de favor (ascensos de sueldo y cargo) a su compañera sentimenal, empleada del mismo organismo.
El grupo concluye que se violó el código de conducta y las reglas de personal 3.01, 5.02 y 6.01", señala el informe de 52 páginas, que indica que, al dictaminar las condiciones específicas del traslado temporal de su pareja, Shaha Ali Riza, funcionaria del Banco Mundial, y dar instrucciones al vicepresidente de recursos humanos para que aceptase los términos establecidos, Wolfowitz incurrió en un "conflicto de interés".
Efecto dañino
Los miembros de la comisión consideran además que el incremento salarial decretado por Wolfowitz para su pareja supera el rango máximo establecido en la regla 6.01. El presidente del Banco Mundial dictaminó que Riza percibiría un incremento inicial de 50.000 dólares que iría seguido de revisiones anuales. Tras el primer aumento anual, su salario quedó situado en los 193.590 dólares libres de impuestos, más de lo que cobra la secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice. Las revisiones anuales del salario también superan lo estipulado por las normas, según el informe, y el ascenso decretado antes de su partida también habría sido irregular, según la regla 5.02 de la institución.
Los responsables del informe, entre los que se encuentran siete de los 24 miembros del Comité Ejecutivo, destacan que la actual controversia "ha tenido un efecto negativo dramático en la reputación y credibilidad" del organismo.