Los embajadores de ambos países están reunidos en Bagdad para tratar el futuro de Irak. Se trata del primer contacto de alto nivel desde que rompieron relaciones el 7 de abril de 1980 en medio de la llamada "crisis de los rehenes". El representante de EEUU, Ryan Crocker, y el de Irán, Hasan Kazemi Qomi, se reunieron hacia las 4:00 (hora argentina) en la oficina del primer ministro iraquí, Nuri al Maliki.
La entrevista se produce en medio de acusaciones cruzadas entre los dos países por su intervencionismo en Irak.
Un portavoz del Ministerio de Exteriores iraní acusó el pasado sábado a los servicios de inteligencia de EEUU de reclutar a espías para cometer actos de sabotaje en áreas fronterizas entre Irán e Irak.
EE UU ha acusado en varias ocasiones a Irán de proveer armamento pesado, como cohetes o bombas, a las milicias chiíes e incluso a algunos grupos insurgentes suníes que operan en Irak contra el Gobierno.
El espinoso programa nuclear
No obstante, la agenda seguramente contenga otros elementos, como el programa nuclear iraní o el análisis de unas relaciones diplomáticas rotas desde la Revolución Islámica iraní de 1979. El régimen islámico iraní teme que el Gobierno de George W. Bush esté planeando un cambio de régimen en Teherán por la fuerza, tal como hizo con la dictadura de Sadam Husein en Irak.
Por su parte, Estados Unidos y sus aliados árabes suníes están profundamente preocupados por el aumento de la influencia de Irán en Oriente Próximo y por el auge del islamismo radical, lo que se une a la abierta hostilidad de Irán hacia Israel.
El Gobierno iraní ha tratado de restar importancia a estos contactos, considerados un error por los sectores ultraconservadores. El régimen dijo ayer que "no se jugara con la especulación" sobre el resultado de las conversaciones con representantes estadounidenses.
En su comparecencia semanal ante los medios, el portavoz de Exteriores, Mohamed Ali Hosseini, declaró que, por el momento, "existen hechos que no se pueden asociar, pero tampoco se puede decir que no se ha dado paso alguno", en declaraciones a la agencia oficial IRNA.
27 años de enemistad
Se trata del primer contacto de alto nivel entre Estados Unidos e Irán desde que ambos países rompieron sus relaciones el 7 de abril de 1980 en medio de la llamada "crisis de los rehenes".
Más de medio centenar de estadounidenses permanecieron cautivos durante 444 días en su embajada en Teherán entre noviembre de 1979 y enero de 1981, después del derrocamiento del Sha y la instauración de un régimen islámico.
Maliki dijo en su discurso de apertura de la cumbre de hoy, tras el cual se retiró, que confía en que la reunión sea "positiva, transparente y conlleve un alto grado de responsabilidad", según palabras recogidas por el canal de televisión oficial iraquí "Al Iraqiya".
El primer ministro añadió que considera que su gobierno tendrá protagonismo en las negociaciones "buscando dirigir el diálogo en la dirección correcta". Además, Maliki expresó su confianza en que el conflicto en Irak sea el principal asunto en la agenda de los diplomáticos.