Exhorta padres orienten hijos sobre efectos nocivos de las drogas

SANTO DOMINGO.;- El presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) alertó anoche a los padres para que ‘orienten y protejan a sus hijos frente al peligro mortal’ que significan los estupefacientes, a los fines de evitar que sean utilizados como ‘marionetas y carne de cañón’ por los promotores de esa terrible fuente de desasosiego, colapso y muerte.
El mayor general Rafael Radhamés Ramírez Ferreira hizo el llamado a los cabezas de familia, sin importar la clase social a que pertenezcan, diciendo que los jóvenes son un tesoro “que debemos cuidar, orientar y conducir, si en verdad queremos un mejor y más promisorio futuro para nuestra nación”. El oficial hizo la alerta en una conferencia que dictó en el Club de la Hermandad de Pensionados de las Fuerzas Armadas.

Ramírez Ferreira dijo que por la naturaleza de su trabajo y como padre está obligado a convertirse en cabeza de una campaña nacional a favor de los jóvenes, diciéndole y enseñándoles “a decir un no rotundo a las drogas”, las que definió como un cáncer que “lo arruina todo: la salud física y mental, la moral y los valores, la economía y el buen nombre de la familia”.

Y agregó que “no podemos ser padres de familia hasta los linderos o verjas de nuestros hogares”, sino que “tenemos que involucrarnos de forma directa en el proceso formativo del joven”, sabiendo que las drogas no son un juego, no son una diversión ni fuente de vida, sino el camino hacia la destrucción del individuo en todas sus manifestaciones. “Los padres estamos en el deber de ser paradigmas, no en teoría sino en la práctica”.

Sin embargo, el jefe de la DNCD dijo que “el sombró programa que presenta la lucha contra las drogas tiene que cambiar”, situación que se producirá cuando los organismos responsables de asumir ese compromiso lo hagan de manera coherente y continua. “La tarea es ardua, dura, nada sencilla, pero al final del túnel contemplaremos la luz de la esperanza y la concordia”, confió.

Manifestó que su dramático llamado es a consecuencia del nivel de expansión alcanzado por el negocio de los estupefacientes, aunque aclaró que la DNCD, las Fuerzas Armadas y la Policía hacen lo necesario para hacerle frente a los promotores del lucrativo negocio, del que dijo “es funesto en todas sus aristas y, por demás, devastador para la célula más significativa de una sociedad” la familia”.

Expuso que “no hay institución, asociación o comunidad que no reciba su impacto”, daño que se inicia en el origen de la materia prima de donde sacan los alcaloides hasta el trasiego y comercialización de los mismos hasta llegar a convertirse en “un cáncer que se extiende por la estructura orgánica de nuestras naciones” hasta hacer metástasis en el seno de la familia, llevándose de encuentro todo lo que encuentra a su paso.

“Ese núcleo donde se forjan los ciudadanos del mañana, donde se sientan las bases de los principios y el amor, se ha ido mermando en los últimos años por la embestida despiadada de esta amenaza de escala mundial y de la cual la República Dominicana no puede sustraerse”, dijo Ramírez Ferreira ante un nutrido público integrado por oficiales retirados de alta y media graduación, así como de familiares de estos.

30 de mayo, 2007.-