Aveces uno llega a la dolorosa conclusión de que el país, nuestro país, les duele solamente a unos pocos, que otros son más anti-dominicanos que todos los que han dado demostración de serlo, y que lejos de dolerle lo nuestro, les causa enfermedad los males de otros.
Nadie entiende como dominicanos acabamos en playas extranjeras contra lo nuestro, y como hace mos causa común con quienes nos acusan de maltrato a losm haitianos, de odio hacia esa nación y sus ciudadanos, cuando la realidad es que hemos sido victimas ayer y victimas hoy de sus miserias y sus grandes males de los que no tenemos la culpa.
Vemos como el Canciller Morales Troncoso, y el gobierno, parecieran transitar solos el amargo tra- bajo de defendernos de malos extranjeros beneficiados de nuestra bondad y hospitalidad, pero en el fondo enemigos jurados de todo lo nuestro.
Como se ataca al Metro por odios y por envidias, como se defiende al depredador Roberto Salcedo, enemigo jurado de las aspiraciones de continuar del Presidente, aunque disque sueña con ser su compañero. Asi las cosas alguna prensa publica solamente lo que ataca lo nuestro, y lo que beneficia a un depredador, que al igual que nuestros enemigos de fuera, es un enemigo interno de la peor calaña.
Sencillamente nos………
