SANTIAGO.- Con la seguridad de que sus familiares contaban con dinero suficiente para pagar un rescate de 800 mil pesos, tres sujetos secuestraron al propietario de una pizzería, pero ayer lo dejaron libre tras comprobar que los parientes ni remotamente cuenta con esa suma. Carlos Julio Fernández, de 29 años de edad, fue raptado el pasado viernes, a eso de la una de la tarde por los desconocidos, minutos después de salir de su pequeño negocio localizado en el municipio de Navarrete, con el propósito de comprar una tarjeta para llamadas telefónicas.
Ayer, cuando los individuos se percataron que Carlos Julio no disponía de esa cantidad de dinero y sus familiares cercanos mucho menos, optaron por liberarlo en la carretera que comunica este municipio con Licey.
Relató que los secuestradores, al momento de interceptarlo, llevaban sus rostros cubiertos con pasamontañas y que, inmediatamente lo tuvieron bajo su dominio, procedieron a colocarle en la cabeza una funda de tela.
Dijo que a bordo del vehículo permanecieron alrededor de tres horas corriendo sin detenerse, aunque presume que no salieron de esta ciudad, sino que se pasaron el tiempo circulando por calles y avenidas de aquí.
“En varias ocasiones me reclamaron que buscara ese dinero o de lo contrario me matarían; incluso uno de ellos llegó a ponerme en la cabeza una pistola, mientras que otro le pedía que me matara”, informó Fernández.
En los trías que tuvo bajo cautiverio, al joven comerciante apenas le dieron a tomar jugo de piña, lo que se produjo el sábado en la noche, de acuerdo a su testimonio.
Ante la evidencia de que no tenía dinero, los secuestradores decidieron el sábado ponerse en contacto con su padre, Félix Benjamín Fernández, reclamándole el pago de los 800 mil pesos, a cambio de su liberación.
“Pero les dije que yo no tenía ni cinco pesos, lo que aparentemente comprobaron, ya que soy un chofer de carro público, indicó el padre de la víctima, quien reside en el sector El Ejido, de esta ciudad.
Esta mañana, desde el departamento de relaciones públicas de la policía en esta ciudad se informó que miembros de esa institución especializados en secuestros investigan el hecho, al tiempo que se busca capturar a los responsables del acto.