No tenía idea de hasta qué punto se identificaba la comunidad dominicana de Nueva York con el Presidente Hugo Chávez. En un derroche de solidaridad se convirtió el encuentro organizado para los partidarios de la reelección de Mercedes Castillo, a un 4to periodo al frente del Colegio Dominicano de Periodistas.
El público congregado allí, manifestó con furor su apoyo al Presidente Hugo Chávez, no solo frente a Mercedes Castillo, quien días antes había ofrecido declaraciones desafortunadas condenando al Presidente venezolano por el cierre de varios medios, sino frente a periodistas que asistieron en calidad de observadores, pero cuyos medios editorializan y promueven a un Chavez “dictador”.
El acto desde el punto de vista masivo fue todo un éxito, también porque mostró una vez más la capacidad y el espíritu solidario de la comunidad dominicana. Desde Nueva York, los dominicanos asisten con remesas a la isla, dan apoyo a la economía de la nación, y socorren al país no solo ante los embates de la naturaleza, sino también de los malos gobiernos, inyectándole dinamismo, disidencia política al estatus quo y al debate político, pero especialmente el dominicano/a de New York con frecuencia muestra cierta claridad políticamente, que no siempre se observa en la isla.
Así quedo demostrado en el marco del encuentro con Mercedes Castillo, quien diserto sobre la Libertad de Prensa en Santo Domingo, en la Sala Francisco Requena del Comisionado de Cultura la semana pasada.
Afectó el acto, sin embargo las impropiedades de los organizadores, quienes incluso al presentar a Castillo, hicieron uso de argumentos maniqueístas sobre su estracto social y la pigmentación de su piel. También que no se le concedió turno a ningún periodista y/o colegiados de los presentes. La excepción fue la intervención del veterano periodista Fedérico Pinales, quien prácticamente al cierre del encuentro, le exigió al moderador le dejara hablar, auque ello fuera como afirmaran algunos periodistas para "convertirse en el abogado del diablo".
La moderación lucio pobre, olvidadiza de nombres y figuras de primerísimo orden en la comunidad dominicana, lo que a simple vista pareció dar la impresión de ser el motivo por el cual algunos/as representantes de autoridades electas se marcharan y dejando las placas gestionadas afanosamente por los organizador del encuentro, periodista Adalberto Domínguez en las oficinas del Comisionado de Cultura.
Otro aspecto negativo de la moderación fue el de atribuir la condición de periodistas a relacionadores públicos de universidades y agencias de la comunidad, así como a docentes del Alto Manhattan, que acuden a centros comunitarios vinculados al Instituto Dominicanos de Estudios (IDP) con sede principal en Santo Domingo, a recibir cursillos de periodismo y los cuales son apadrinados o por los organizadores del encuentro.
Un dato comentado fue la cara de pocos amigos de la Sub-secretaria general de la seccional periodista Gabriela Remigio, quien acudió tras ser llamada por el moderador para ocupar un asiento en la mesa principal.
Permanecer sentada por casi dos horas fue considerado por no pocos periodistas como un insulto al momento de campaña que vive la seccional en NY, en la cual no todos los periodistas apoyan la reelección de Mercedes Castillo, para otro periodo al frente del Colegio.
Remigio quien aspira junto a Mayra La Paz a dirigir el CDP-NY, intentó justificarse concluido el acto, pero algunos de los periodistas anti-reelección de Castillo sentenciaron que en castigo a que Remigio se prestó a jugarle el juego a la reelección no solo de la Presidenta del CDP, sino al propio Fernández, toda vez que Castillo asumió la defensa del Presidente en lo que respecta a la reelección CDP-Gobierno, no le darán su voto a Remigio.
Sin embargo, lo que al principio pareció ser un bullicio irreverente desde el fondo de la sala, con discusiones, poco a poco preparó el ambiente hasta convertirse en reacciones y toma de postura en apoyo al Presidente Hugo Chávez y contra las declaraciones de la Presidenta del CDP, emitidas días antes de su llegada a la urbe, declaraciones en consonancia con la posición de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), de abierta militancia contra el mandatario venezolano.
En el fondo se observaba a grupos de periodistas y ex secretarios generales del gremio CDP_Inc.NY, entregar flier (panfletos) y copias de artículos que enfrentaban la postura de Mercedes . En reiteradas ocasiones se le escucho a Mercedes pedir, rogar ser escuchada, y clamar por el silencio para bien concluir su presentación o dar respuestas a la lluvia de preguntas del público.
Ante las presiones y preguntas, Castillo declaró, sobre el caso Chávez, que ella misma necesitaba “más información sobre el tema”.
La Presidenta del CDP desconoce la atmósfera y las características de la comunidad dominicana en la urbe, fruto de ello cometió varias impropiedades en su decir, y fue enfrentada por el público cuando le tocó hacer uso de la palabra. Acostumbrada a sortear situaciones más o menos fáciles desde el punto de vista gremial en la isla, se le vio a una Mercedes Castillo confundida y en aprietos, aunque altiva…valiente.
Su intento de justificar y separar responsabilidades entre el Presidente Leonel Fernández, los militares de su gobierno y sus funcionarios en hechos que atentan contra la libertad de prensa en dominicana, lanzo mas leñas al fuego.
Así que bajo visible desorientación se le escucho decir a Castillo que “existen niveles de esa libertad de prensa en dominicana”,
Su argumento casi malabarista de que el gobierno de Leonel Fernández, coloca publicidad en más de un 80 por ciento en todos los medios de la nación, con lo cual se convierte Fernández, en el Presidente y gobierno que más apoyo ofrece a los periodistas y al CDP, encontró mas de un opositor.
“Pero el periodista no debe autocensurarse porque el gobierno le otorgue publicidad,…eso ya depende de la conciencia del periodista”. Afirmo Castillo.
A lo que algunos respondieron en voz alta: "O se muere de hambre…"
Fue un encuentro tan interesante que me recordó los momentos más cruciales de definiciones y luchas de la comunidad dominicana, debates iguales de encendidos que en el pasado se produjeron a casa llena en esa misma Casa de la Cultura, hoy Comisionado de Cultura.
Un encuentro que por demás me hizo observar a viejas cabezas calientes de lo que una vez se mal denominó Comunidad Cultural, deponer todo su ímpetu ante el escenario en azul, neutralizante (y en eso consiste el dominio y performance de la pluralidad),que como alfombra le ofrece a los amigos y enemigos y visitantes, el Comisionado Franklin Gutiérrez, junto a sus disciplinados y corteses empleados/as.
A mi juicio el tema de la libertad de Prensa le quedó corto a la distinguida Mercedes Castillo, tal vez por la falta de experiencia en la redacción de los medios. No es cierto que en dominicana exista Libertad de Prensa, aunque sí Libertad de Empresa, que no es lo mismo ni se escribe igual.
Estoy de acuerdo con Mercedes Castillo, respecto a la relación institucional gremialista que el CDP debe tener con todos los gobiernos tal cual la tienen otros colegios de profesionales. Mas sí como precio, ello ha de llevarnos por igual a la vendimia y la defensa de un gobierno, por aquello de que el CDP es fruto de una Ley del Estado dominicano, es por lo que vengo insistiendo hace años que es justamente por ese infortunio y las contradicciones que encierra la Ley del Colegio, que es imposible ser juez y parte. Vale la pena preguntarse: ¿Para qué sirve un Colegio de Periodista?.
La ingenuidad y lo sereno, pero convencida, del discurso de la Presidenta del Colegio Dominicano de Periodista, jamás debió llevarla a cargarle tanto el dado a la auto-censura, so-pretexto de ocultar u omitir consciente o inconscientemente a los verdaderos responsables de la vendimia y la coerción contra los periodistas.
Es harto conocido que el gobierno de Leonel Fernández sí otorga publicidad a dos por cheles, pero también maneja, certifica y desertifica periodistas, y sabe apretarle la tuerca a aquellos periodistas y medios que no se doblegan por el hecho de recibir publicidad. Y de ello hay ejemplos dignos que hasta se ven obligados a cambiar de frecuencia, a cerrar sus medios, y aquí, mismo en Nueva York la representación de ese gobierno de Fernández, maneja y monopoliza la nómina de publicidad del Consulado y de la Misión Dominicana.
Lo que sí habló a favor de Mercedes, fue una especie de garbo, un cierto remozamiento que la mantuvo más o menos serena, con gesticulación uniforme, como quien segura de su arenga intentaba ejercer el control del escenario con seguridad pasmosa, como quien estrena nueva aura. Sólo que con esta comunidad dominicana nadie puede. Entonces que viva Chávez!!.