Washington, 12 jun (PL) Autoridades de la ciudad de Dallas, en el suroeste de Estados Unidos, reciben hoy ayuda federal para detener el consumo de un nuevo alucinógeno conocido como heroína de queso, informa la televisora CNN.
El bajo costo de los componentes de la droga permite que los traficantes la ofrezcan a precios asequibles a un público cada vez más joven, por lo cual, los especialistas redoblan su atención en las escuelas de la urbe.
Los oficiales intentan atajar la venta del narcótico, que ya provocó la muerte de 21 adolescentes del área de Dallas, y advierten a los padres a que estén atentos a los cambios emocionales o actitudes sospechosas en sus hijos.
Este es un asunto que debe preocupar a las personas en cualquier lugar del país pues, con las ventajas de Internet, el mal pronto puede extenderse a ciudades tan distantes como Nueva York, indicó el agente especial de la Administración de Drogas y Narcóticos Steve Robertson.
La heroína de queso mezcla alquitrán con sustancias presentes en medicamentos de consumo habitual, y provoca adormecimiento y letargo, o, euforia, sed excesiva y desorientación, según el organismo del consumidor.
El doble efecto sedativo del compuesto constituye un arma mortal para los adolescentes pues reduce el ritmo cardiaco hasta provocar un paro del corazón, precisa el detective de la policía de Dallas Monty Moncibais.
