Paris Hilton sale esta semana de la cárcel de mujeres del Condado de Los Angeles esta semana y ha manifestado su deseo de darle una nueva dirección a su vida. La heredera fue arrestada por manejar en estado de ebriedad y condenada a 45 días de prisión de los cuales solo cumplirá 24.
Para la actriz y cantante la situación luego de su salida de prision no será fácil pues a diferencia de otras personas que dejan la prisión, Hilton se encuentra asediada constantemente por fotógrafos y una carrera basada en tener fiestas y posar para los fotógrafos.
Paris insiste en que es una mujer diferente a consecuencia de su tiempo en prisión.
''Yo quisiera cambiar las cosas. Dios me ha dado una nueva oportunidad'', dijo a la entrevistadora de televisión Barbara Walters.
En tanto mantenga su licencia de conducir en regla y no rompa ley alguna, Hilton completará su sentencia de libertad condicional en marzo del 2009. Podría reducir el plazo en 12 meses si realiza servicio comunitario o accede a grabar un mensaje de servicio público, dijo la fiscalía de la ciudad.
Pero Hilton y su familia no han evitado a la prensa durante su encarcelamiento. Esa atención constante, junto con ''la fascinación enfermiza (de la sociedad) con el fracaso'' volverá aún más difícil la transición de la heredera, dijo Dorian Traube, profesora de trabajo social de la Universidad del Sur de California.
''Es como si ella hubiera creado las condiciones para su fracaso porque se ha hablado tanto de que ha cambiado, ha descubierto la religión y reza constantemente'', acotó. ''La gente le tiene rencor porque es famosa solamente por asistir a fiestas, por eso la observa y espera que fracase''.