Oslo, 28 jun (PL) La desertificación es una crisis ambiental de proporciones mundiales, que afecta en la actualidad de 100 a 200 millones de personas, divulgó hoy aquí Naciones Unidas (ONU). Según el estudio presentado por la organización, la continua degradación de la productividad del suelo supone una amenaza inminente para la estabilidad internacional.
Para los próximos 10 años, 50 millones de personas estarán forzadas a abandonar sus hogares debido a la desertificación, cifra que equivale a la totalidad de habitantes de Sudáfrica y Corea del Sur.
Zafaar Adeel, director del departamento de Medio Ambiente de la universidad de la ONU, comunicó que las zonas de mayor impacto por esta crisis son Africa subsahariana y Asia central.
Adeel, quien dirige también la investigación, informó que junto al generalizado problema existen otros factores, como la pobreza y los conflictos bélicos, que conllevan al desplazamiento de la población.
El estudio exhortó a los gobiernos a buscar formas para frenar el avance de los desiertos, acelerado por los cambios climáticos y la explotación de la tierra.
Una adecuada plantación de cultivos y árboles en las tierras cercanas a éstos es una medida simple que ayuda, agregó Adeel.
Además, en el trabajo se citó al ecoturismo como una forma para crear nuevos empleos, y se llamó a unir esfuerzos para combatir la desertificación.