SANTIAGO.- Fue llevado esta madrugada a una habitación de la clínica Unión Médica el menor José Miguel Hilario Vásquez, herido la noche del miércoles de un balazo en la cabeza, mientras se encontraba en el frente de su residencia, localizada en el barrio Zamarrilla, de esta ciudad. Mientras tanto, trascendió hoy que varias personas e instituciones organizan para esta semana una misa por la salud del herido y que, al término de la misma, se producirá una marcha, en reclamo de que cese la delincuencia en el país.
Los doctores Adriano Valdez Russo y Chiqui Liriano, quienes asisten a Hilario Vásquez, resolvieron que el joven de 11 años de edad fuera llevado a la habitación 620 del referido centro asistencial, a pesar de que su cuadro clínico sigue siendo de pronóstico reservado.
Esta mañana, la señora Miguelina Vásquez, madre de José Miguel, informó que se decidió sacarlo de dicha unidad especializada porque el paciente precisaba de la mayor privacidad posible y que el flujo de parientes de los otros internos no lo garantizaba.
“El niño está en la habitación, pero con todos los aparatos médicos necesarios y un cuidado profesional como si estuviera en el área de cuidados intensivos”, aclaró la madre de Hilario Vásquez.
Resaltó la señora Vásquez que, aunque en las últimas horas el menor ha experimentado cierta mejoría, todavía su estado de salud es crítico y apenas responde a ciertos estímulos y que ya reconoce algunos de sus familiares.
Del disparo que lo alcanzó en la cabeza es responsabilizado José Alberto Tejada, de quien se dice fue deportado desde los Estados Unidos, luego de cumplir una condena por haber asesinado un joven en Nueva York.
Esta mañana, la madre de Hilario Vásquez pidió a Tejada que se entregue a las autoridades, a fin de que permita el esclarecimiento del hecho de sangre, por el que está detenido José Antinoe Reyes Rondón, quien conducía la passola cuya parta trasera ocupaba Tejada y desde donde hizo el disparo a un tal Engy pero que, al errarlo, alcanzó en la cabeza a Hilario Vásquez.
El hecho de sangre ocurrió la noche del miércoles en la avenida Mamá Tingó número 21 del barrio Zamarrilla, donde vive Hilario Vásquez con sus padres Jorge Hilario Pichardo y Miguelina Vásquez.
Hasta allí llegaron Engy y unos amigos que minutos antes habían discutido con Tejada mientras jugaban baloncesto. Frente a la casa fueron alcanzados por Tejada y Reyes Rondón, reiniciándose la disputa verbal que culminó con el disparo que alcanzó a Hilario Vásquez.