SANTO DOMINGO.-El presidente de la Federación Nacional de Transporte la Nueva Opción, (Fenatrano), Juan Hubieres, reconoció este miércoles que el Ayuntamiento del Distrito Nacional no tiene ninguna responsabilidad en la deuda que mantiene la entidad que preside con el Banco de Reservas por la adquisición de 422 minibuses, para cuya compra el ADN fue colocado como garante durante la administración del ex síndico Johnny Ventura. “Esa deuda no es del Ayuntamiento, el Ayuntamiento del Distrito Nacional ha sido una víctima en esta situación”, apuntó Hubieres durante un encuentro que sostuvo con el síndico Roberto Salcedo en el despacho del ejecutivo edilicio para tratar asuntos relativos a la deuda y la amenaza del Banco de Reservas de cargar 482 millones de pesos a las cuentas del ADN para recuperar el dinero por la compra de las unidades vehiculares.
Se ha coordinado una reunión para el próximo lunes entre el administrador del Banco de Reservas, Daniel Toribio; el síndico Salcedo y Hubieres para aclarar todo lo relativo a la deuda de Fenatrano con la entidad bancaria.
Hubieres consideró que sería un acto de inconsecuencia cobrar al Ayuntamiento los 482 millones de pesos que debe Fenatrano , pues el ADN no ha sido beneficiario de la compra de las guaguas y minibuses que se adquirieron con el dinero, por lo que entiende que el Cabildo no tiene responsabilidad moral en esa transacción.
“Hemos venido a plantearle al síndico que la deuda que existe en el Banco de Reservas es una responsabilidad de Fenatrano y de los dueños de las guaguas azules, y que mal haría la entidad financiera en cobrarle a quien no debe”, aclaró Hubieres.
En el encuentro, el síndico Roberto Salcedo anunció que coordinó un encuentro para el próximo lunes entre el empresario del transporte Juan Hubieres y el administrador del Banco de Reservas licenciado Daniel Toribio, con la finalidad de que se identifiquen canales que lleven a solucionar esa situación.
Juan Hubieres dijo que siempre Fenatrano ha estado en disposición de pagar la deuda contraída con el Banco de Reservas, monto que asegura se duplicó a raíz del incremento estrepitoso del dólar fruto de acciones desacertadas tomadas por la pasada gestión de gobierno.
Resaltó que siendo presidente de la República, Hipólito Mejía se negó a traspasar al Plan Renove la deuda asumida con el Banco de Reservas y por la cual se colocó al ADN como garante.
“Juan, no seas tonto, que esa es un hacha que yo tengo en el pescuezo tuyo y del síndico, en caso de que se me pongan de traviesos”, habría dicho en la oportunidad el ex presidente Mejía, según Hubieres.
De su lado, el alcalde Roberto Salcedo, al tiempo de calificar de positiva la disposición del presidente de Fenatrano de pagar el dinero que debe al Banco de Reservas por concepto del precitado préstamo, advirtió del impacto negativo que podrían recibir los programas que actualmente ejecuta el ADN en toda la Capital, si se cargan los atrasos al Cabildo capitalino.
“Para el ADN sería calamitoso que el Banco de Reservas le descuente de sus cuentas los recursos que están comprometidos en la ejecución de diversos programas que desarrolla el Cabildo en toda la Ciudad de Santo Domingo”, advirtió Salcedo.
Dijo que los programas del ADN no merecen verse afectados por esa situación, y agregó que la actitud de Fenatrano de pagar la deuda podría ser el elemento que arroje la solución de ese problema.
Se mostró esperanzado en que la reunión entre Hubieres, él y Toribio sirva para formular propuestas de cómo deberá pagarse y en que plazo el monto adeudado por Fenatrano al Banco de Reservas.
Señaló que de esa deuda les fueron descontadas varias partidas de tres millones de pesos al ADN, situación que adujo en su momento impactó de manera negativa los programas que en beneficio de los munícipes desarrollaba en ese momento el Cabildo capitalino.
Asimismo, el presidente del gremio del transporte, Juan Hubieres, aseguró que nunca ha dejado de aportar las cuotas por concepto de la deuda el Banco de Reservas, aunque admitió que las cantidades depositadas eran inferiores a las acordadas con las autoridades de la entidad financiera a la hora de acordar el préstamo.
