SANTO DOMINGO. -La exvicepresidenta Milagros Ortiz Bosch aseguró que el reparto de "ayuditas" y dádivas que hacen los legisladores con el llamado cofrecito y a través de otros mecanismos, es un reconocimiento del incumplimiento de sus responsabilidades institucionales y una evidencia del grave deterioro del sistema político dominicano.
“Los senadores y diputados son elegidos para de manera institucional elaborar leyes y políticas que sirvan de sustento a programas destinados a resolver socialmente los problemas de la gente, no para repartir ayuditas a personas o grupitos de personas”, puntualizó la también dos veces senadora de la Capital y ex secretaria de Estado de Educación.
“Ahora muchos legisladores pueden haber logrado su reelección en base a las ´ayuditas´ de los cofrecitos, amplió, “pero mañana, cuando deban competir con quien tenga un cofre más grande, van a perder el liderazgo político y social construido en toda una vida”.
Argumentó que los potenciales dueños de esos cofres más grandes pueden haber obtenido sus recursos de manera no transparente o legal, con lo que no sólo harán desaparecer liderazgos políticos provenientes del trabajo social, comunitario o de otro tipo sino que también eventualmente estaremos generando nuevas amenazas para el sistema político y su carácter representativo e institucional.
Dijo que está harto demostrado que los problemas de pobreza y del subdesarrollo se resuelven con leyes y reformas y no con dádivas, de modo que antes con las ONGs y ahora con los cofrecitos lo que estamos es poniendo de relieve el incumplimiento de las responsabilidades institucionales de los legisladores, y sobre todo la miseria de nuestro sistema político.
Exhortó a los legisladores a abandonar esas políticas y a las nuevas generaciones del liderazgo a entender que el clientelismo es evidencia y fuente de atraso y no de progreso y avances de los pueblos.
Ortiz Bosch se puso de ejemplo al recordar que en 1994 ella fue elegida senadora por el antiguo Distrito Nacional que era la gran capital de la República, y “mi trabajo en las legislaciones en favor de los derechos de la mujer, la educación, el mejoramiento del sistema judicial, y la modernización y reforma del Congreso, hizo que la población me reeligiera en 1998 con más votos que en la primera ocasión”.
“Y yo no alcancé ese logro con políticas clientelistas sino repartiendo derechos y reformas sociales en favor de la gente”, concluyó al hacer un comentario en su espacio Milagros desde la Z, que conduce junto a Julio Cordero y Julissa Hernández por la radioemisora Z-101 F.M.