SANTO DOMINGO.-Casa Abierta aseguró este lunes que hay escenarios equistados en sectores de poder que son procesados por la Direccion Nacional de Control de Drogas (DNCD). El Director Ejecutivo de Casa Abierta Juan Radhamés del Rosa dijo que comparte la preocupación del Presidente de la DNCD, mayor General Rafael Radhamés Ramírez Ferreira en el sentido del auge del uso de drogas, pero aclaró que los datos del jefe antinarcóticos podrían haberse referido a la población que ha sido apresada por ese departamento en el rango de las edades señaladas.
Al referirse a las declaraciones del presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas, el pasado viernes De la Rosa señaló que la sociedad dominicana ha llegado a un nivel de deterioro tal, que las drogas legales e ilegales tienen tanta influencia, que se salen de las estadísticas que presentara el mayor General Rafael Radhamés Ramírez Ferreira "en vistas de que hay escenarios enquistados en los sectores de poder y que no llegan a ser procesados por las autoridades".
El director de Casa Abierta afirmó que desde hace ya mucho tiempo, en el país se ha sentido la incidencia del tráfico a través de pagos de campañas políticas, de creación de empresas y otras formas de corrupción a la vez que señaló que las drogas como la cocaína, la heroína y el Éxtasis son sustancias que no se consumen en los barrios pobres y pero que no son sometidos por la DNCD.
Juan Radhamés De la Rosa señaló que el microtráfico maneja cantidades menudas de recursos, por lo que negó que en él este el problema del auge de las drogas y lo situó en las esferas de poder en virtud de los costos que por ese concepto se invierte.
“Cuando un cabo de la policía ve entrar a uno de nuestros barrios, una Jeepeta del año, conducida por un individuo de clase media, que pudiera ser un Policía, un Coronel, un general, ¿usted que cree que lo va a detener para preguntarle que lleva ahí? Claro que no y esas son las personas que introducen la droga” manifestó el directivo de Casa Abierta.
Afirmó que en los barrios no se produce Cocaína ni Marihuana ni éxtasis esa droga entra a los barrios, de la mano de sectores de poder que tiene recursos para evadir la justicia o que tienen la influencia que cuando suele caer preso llama el tío o el amigo de alto rango militar o el funcionario y pide que lo suelten.