SANTIAGO.- El presidente de la Cámara de Comercio Producción de Santiago estimó que el Poder Ejecutivo debe promulgar la nueva ley que corrige la situación creada con el pasivo laboral, a fin de que se puedan empezar a sentar las bases para la recuperación de los empleos perdidos por el mismo. Destacó Ricardo Fondeur que la pérdida de más de 40 mil empleos constituye no solo un retroceso para ese sector, sino un ingrediente negativo para mejorar la calidad de vida de la población, para garantizar las estabilidad económica y la paz social, además de un caldo de cultivo para la delincuencia.
Destaco igualmente los aportes del sector en materia de integración vertical de la industria textil, calificación de mano de obra especializada e integración del país a una cultura de exportación.
Expresó que se han visto afectados con esta situación creada, por un conjunto de factores que no fueron atendidos a tiempo y cuya solución ha sido dilatada en desmedro de la capacidad del país por lograr contratos de trabajo que garanticen la sostenibilidad de esta actividad productiva.
"En este sentido, el pasivo laboral ha actuado como un elemento de costos que ha venido a agravar el problema se competitividad del sector, afectando aun más la pérdida de empleos y la capacidad de atraer inversiones", agregó.
Por razones coyunturales y políticas, Fondeur dijo que el sector textil de zonas francas no puede contar ni aspirar a las condiciones y el apoyo que reciben sus homólogos de Centroamérica de parte de sus respectivos gobiernos.
"Por tanto, es de justicia que las acciones que sean posibles de efectuar para apoyar el sector, sean llevadas a cabo con la celeridad que demandan las circunstancias", arguyó el presidente de la Cámara de Comercio y Producción de Santiago.
Adujo que el empleo sigue siendo un factor clave para la estabilidad democrática "y sigue figurando como una de las principales aspiraciones del pueblo dominicano en las encuestas que se publican".
En otro sentido, Fondeur estimó que el proceso de desarrollo dominicano, no esta en condiciones de prescindir de los empleos que representa esta actividad económica, ni de los que puedan recuperarse luego de corregirse una serie de distorsiones internas que han venido afectando su competitividad.
"Hasta la Organización Mundial de Comercio ha reconocido el papel social de estos centros fabriles, al otorgar una extensión a la vigencia de los incentivos fiscales con que se propicia la competitividad del sector en nuestras naciones", razonó.
De acuerdo al dirigente empresarial santiaguense, aunque haya sido tardía y lentamente, es necesario que se tomen las medidas pertinentes para que, en el más breve plazo posible, el sector inicie un proceso de recuperación de parte de los empleos y los contratos perdidos.
"Bajo condiciones que son alcanzables para el país, pueden ser producidos en nuestras zonas francas, pero que lamentablemente hoy se encuentran en manos de nuestros competidores", concluyó diciendo el presidente de la Cámara de Comercio y producción de Santiago.