SANTO DOMINGO.- El Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC) en precaución por los efectos que pueda dejar el paso del huracán Dean por la República Dominicana, determinó que todas las aeronaves que se encuentran en los aeropuertos del Litoral Sur del país, sean trasladadas hacia las terminales de la Zona Norte.
Otra de las medidas que fueron tomadas por la institución fue asegurar contra el terreno, con argollas y cadenas, las aeronaves inutilizadas en los aeropuertos, para evitar su desplazamiento, por la velocidad de los vientos que pueda traer el fenómeno natural anunciado.
“El Plan de Contingencia detalla las medidas que se tomarán en los aeropuertos de Las Américas, San Isidro, La Romana, Punta Cana, Barahona y Cabo Rojo, antes, durante y después del paso del huracán Dean por estos predios”, según la información suministrada por Ángel de la Rosa, encargado del departamento de Relaciones Públicas del IDAC.
El informe también señala que esas mismas medidas se tomarán para proteger las instalaciones y equipos en todas las dependencias del IDAC en el país y que fue realizado en coordinación con el Centro de Operaciones de Emergencia (COE), Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET), la Fuerza Aérea Dominicana (FAD) y los departamentos de Operaciones de cada Aeropuerto.
Los ejecutivos de la institución que regula la aviación civil en el país, se mantendrán comunicados por diferentes vías, a los fines de actuar con la mayor premura posible en caso de una emergencia, agregó de la Rosa.
Se ha dispuesto, además, la colocación de fortines para cubrir los vidrios de la torre de control de las terminales aeroportuarias, lo mismo que en las áreas administrativas y técnicas, donde se encuentran las salas de controles de Tránsito Aéreo.
En coordinación con Aeropuertos Dominicanos Siglo XXI (AERODOM) se ha trabajado en la limpieza de los desagües próximos a la torre de control del Aeropuerto Internacional Las Américas, doctor José Francisco Peña Gómez.
El plan de contingencia del IDAC establece, asimismo, la total protección de la citada Torre de Control, básicamente de su sistema eléctrico.
“Se trata de que, aunque los vientos en ráfagas y los torrenciales aguaceros que puedan provocar el huracán Dean, nuestros aeropuertos sigan funcionando a pesar de los eventuales daños sean lo más mínimo posible”, agregó Ángel de la Rosa, vocero del IDAC.
Las previsiones para este tipo de eventos se habían venido discutiendo, analizando y concretizando documentalmente por los encargados técnicos del IDAC y el director general, secretario de Estado, licenciado Norge Botello desde hace mucho tiempo, precisó de la Rosa.
Luego del paso del huracán, los técnicos procederán a identificar mediante un listado previo, los daños que haya podido provocar el fenómeno natural, para comunicarlos al Departamento de Activos Fijos.