Santo Domingo, 20 ago (PL) Tras asolar Jamaica, el huracán Dean se dirige hoy a toda velocidad hacia las Islas Caimán, el pequeño paraíso fiscal del Mar Caribe administrado por el Reino Unido cuya población teme lo peor.
Jamaica apenas comienza a recontar los extensos daños ocasionados por el choque con Dean, pero reportes de medios regionales dieron cuenta de daños sustanciales en viviendas, árboles destrozados e inundaciones.
De inmediato se carece de información sobre pérdidas humanas.
Las autoridades jamaicanas decretaron el estado de emergencia por 30 días para contener los saqueos de establecimientos que se desataron tan pronto el huracán comenzó a hacer sentir su fuerza.
En su paso arrollador, el próximo destino del huracán son las tres diminutas Islas Caimán: Grande, Brac y Menor, que apenas suman 259 kilómetros de extensión territorial en las cuales están registrados miles de bancos y empresas .
Posesión española desde su descubrimiento por Cristóbal Colón en 1503, próximo a caer en desgracia ante la Corte, las tres islas pasaron a ser posesión británica de Ultramar en 1670 acorde con las provisiones del Tratado de Madrid rubricado con Londres.
Un naufragio de 10 naves británicas en 1788 y la ayuda brindada por la población autóctona a las tripulaciones y pasajeros marcaría el destino de las Caimán, las cuales fueron eximidas desde entonces del pago de tributos a la Corona por el rey británico Jorge III.