SANTO DOMINGO.-El síndico Roberto Salcedo adelantó hoy que el Ayuntamiento del Distrito Nacional tendrá que hacer una inversión cuantiosa en la limpieza del litoral Sur y reparación y restitución de los bancos, aceras y pavimento de los parqueos de un gran tramo de la Autopista 30 de Mayo, dañados por las fuertes olas provocadas por los vientos del huracán Dean a su paso por la Capital. Una comisión técnica designada por el síndico rendirá en las próximas horas un informe preliminar sobre los daños causados por las olas en el Malecón y la autopista 30 de Mayo. La evaluación final será completada el viernes con un recorrido en bote que hará Salcedo el viernes acompañado de funcionarios del Ayuntamiento y periodistas de distintos medios de comunicación.
Salcedo dijo que los daños más severos ocurrieron en los kilómetros 8, 9 y 10 de la autopista 30 de Mayo, de donde fueron retiradas centenares de toneladas de basura, escombros, rocas y arena lanzados al pavimento por el oleaje. Durante dos días consecutivos, unos tres mil obreros y obreras del ADN trabajaron día y noche para despejar el área y restituir el paso por la transitada vía.
Ahora se procederá a retirar los desperdicios, rocas y otros materiales sólidos depositados en los arrecifes de todo el Malecón, “en una tarea que quizás nos tome años y en la que habrá que hacer una cuantiosa inversión”. La evaluación de los daños está a cargo de la Dirección de Infraestructura Urbana del ADN.
“En estos momentos estamos concentrando todo el esfuerzo en la limpieza, despejar la zona porque hay muchos escombros y no sabemos realmente todavía el nivel de peligro que esto supone. Por eso estamos tomando algunas medidas restrictivas en algunas áreas de las aceras para evitar cualquier accidente innecesario”, precisó el síndico del Distrito Nacional.
El ADN concluyó este lunes el retiro de centenares de toneladas de escombros lanzados al Malecón y restituyó el tránsito en el tramo de la Autopista 30 de Mayo que resultó obstruida por las rocas, piedras y arenas lanzadas a la vía por el oleaje causado por el huracán Dean a su paso por la Capital.
Tan pronto se limpiaban tramos de la transitada vía, equipos del Cuerpo de Bomberos del Distrito Nacional lavaban la calzada con mangueras de agua a presión para retirar los restos de arena y evitar la ocurrencia de accidentes por deslizamiento.
El tramo más afectado fue ubicado a la altura del kilómetro 8 de la Autopista 30 de Mayo, donde los bancos y parte del arbolado fueron destruidos por el fuerte impacto de las olas del Mar Caribe.
