CONUCO VIEJO (La Vega).- Fue sacado ayer de las aguas de la Presa de Tavera el cadáver del ingeniero José Manuel Sánchez Sánchez, con lo que suman tres los cuerpos sin vida rescatados, de cinco que el domingo en la tarde murieron ahogados en ese lugar. Aún un no han sido ubicados los restos de Javier Antonio Taveras Rodríguez y Angel Francisco Fabián Sánchez, este último hermano del profesional de la ingeniería que fue hallado en la mañana de ayer.
El cuerpo de Sánchez y Sánchez fue encontrado en avanzado estado de descomposición, por lo que fue sepultado de inmediato en el cementerio de la comunidad Arenoso, de la que eran oriundas las cinco víctimas.
Los primeros restos ubicados por los buzos que desde el lunes en la mañana sondean el embalse de dicha presa fueron los de José Miguel Taveras Ramírez y, horas después, sacaron de las aguas el cadáver de Anthony Javier Peña Vargas.
Los cinco se ahogaron la tarde del domingo último, cuando un bote en el que cruzaban la presa sorpresivamente fue embestido por un fuerte viento que logró tornar la pequeña embarcación en la que iban ocho personas.
Los tres restantes, José Moronta Rodríguez, José Luís Sánchez y Danilo Almonte, quien guiaba la embarcación, lograron sobrevivir a la tragedia.
En las labores de ubicación y rescate de los cuerpos si vida participan diez buzos pertenecientes a la Marina de Guerra, los Bomberos de Santo Domingo y la Defensa Civil de allí, de acuerdo a datos ofrecidos por Francisco Arias, director regional de dicho organismo de socorro, con asiento en Santiago.
Arias informó ayer que los buzos fueron enviados al lugar por el mayor general Luís Antonio Luna Paulino, director general de esa institución, quien también autorizó la presencia aquí de los integrantes de la Unidad Nacional de Respuesta Inmediata (UNRI), compuesta por 66 personas especializadas en rescates, provenientes de la capital y Santiago.
Explicó que esos técnicos tienen la misión de reforzar el trabajo que realizan en el área tanto los buzos como los demás socorristas que, desde la tarde del pasado domingo, laboran en el rescate de las cinco personas que se ahogaron.
Por tercer día consecutivo, familiares y curiosos se encontraban esta mañana en una de las orillas de la presa, observando los trabajos que realizan las unidades de rescate y búsqueda de los cadáveres, entre ellos los tres sobrevivientes.
Arias explicó que, con el propósito de que en las horas de búsqueda haya siempre buzos dentro de las aguas, estos han sido divididos en dos grupos y, mientras unos tratan de ubicar los cadáveres, otros esperan afuera para sustituirlos cuando regresan a la superficie.
“Esto así –señaló el funcionario de la Defensa Civil en Santiago—porque cada buzo tiene equipo para sumergirse hasta 40 pies y, al regresar a tierra, por lo menos debe permanecer cuatro horas para recuperarse físicamente”.