La Dirección General de Aduanas (DGA) y la empresa Philip Morris Internacional Management S.A., suscribieron un acuerdo de colaboración con el propósito de aunar esfuerzos en la lucha contra el comercio ilícito de cigarrillos. Éste es el resultado de más de seis meses de trabajo en conjunto y es parte del proceso de implementación de la nueva política de Aduanas en materia de Propiedad Intelectual.
Aduanas y Philip Morris International Management, S.A. expresan en el acuerdo su voluntad de promover la cooperación efectiva entre la DGA y el sector privado para la reducción y la eliminación de los cigarrillos falsificados y de contrabando.
El acuerdo fue suscrito por el director de Aduanas, Miguel Cocco Guerrero, y Lufty Mufarrij, director para República Dominicana y la región del Caribe de la empresa Philip Morris Internacional, así como por el director de Integridad de Marca para Latinoamérica y Canadá, Andrew Robinson, también de la empresa tabacalera.
Conforme el acuerdo las partes se comprometen a desarrollar "procedimientos tendentes a promover, de la forma más práctica posible, el intercambio mutuo de información, con el fin de identificar las fuentes y los partícipes del comercio ilícito de cigarrillos, teniendo en cuenta la seguridad, confidencialidad y responsabilidad necesarias para llevar adelante la investigación y las acciones legales correspondientes contra el comercio ilícito".
Con ese propósito la Philip Morris International Management, S.A. trabajará de cerca con Aduanas para proporcionar asesoramiento especializado para identificar productos falsificados y buscar la reducción y eliminación de la falsificación y contrabando de cigarrillos. También proveerá información de inteligencia que facilite la aplicación de la ley.
De su lado, Aduanas facilitará cada tres meses a la Philip Morris información sobre el número de acciones tomadas en relación con cigarrillos falsificados y contrabandeados durante el trimestre anterior, con la fecha, lugar y zona geográfica en que se haya desarrollado cada acción.
La falsificación y comercialización ilícita de cigarrillos es un serio problema mundial, frecuentemente asociado al crimen organizado, lavado de dinero, evasión impositiva y fraude al consumidor. Los delincuentes involucrados en este negocio pueden hacer millones de dólares muy rápidamente.
En algunos países el problema es grave, ya que una vez establecido el negocio ilícito de cigarrillos es muy difícil eliminarlo. La práctica delictiva de falsificación y contrabando afecta tanto a los gobiernos, los cuales no perciben ingresos por el pago de impuestos, y a la vez deben invertir grandes sumas de dinero para combatir esa modalidad delictiva, asimismo a los consumidores que adquieren un producto que no reúne el control de calidad de las marcas que comercializan las empresas legalmente establecidas.
La solución de este problema requiere una vigilancia continua, mayor énfasis en la ejecución de la ley y una cooperación permanente entre fabricantes, suplidores, comerciantes, consumidores y gobiernos.
Técnicos de la Dirección General de Aduanas fueron entrenados para detectar cigarrillos falsos:
En el mes de marzo, especialistas de la Philip Morris International impartieron talleres a 80 técnicos de la Dirección General de Aduanas, en los que fueron instruidos con técnicas simples para determinar si un cigarrillo es un producto falsificado, y así evitar que sean introducidos al país, y que se utilice el territorio dominicano para traficar con este producto hacia otros países.
Asimismo, adquirieron conocimientos sobre la manera en que operan las mafias que se dedican a comercializar cigarrillos falsos y del perfil de riesgo de su comercialización.
