Bagdad, 3 sep (PL) El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, llegó hoy en una visita sorpresiva a la base aérea de Al Assad, en la occidental provincia iraquí de Al Anbar, informaron fuentes militares.
El mandatario llega a Iraq cuando sus planes estratégicos respecto al control militar de varias regiones no rinden los resultados que prometió al auditorio político estadounidense.
Este contacto de Bush con Iraq ocurre cuando su aliado británico reanimó el proceso de retirada de sus soldados, lo cual Washington deberá interpretar como negativo para la cohesión de su fuerza multinacional.
Unos 500 militares del Reino Unido se retiraron del Palacio de Basora, en el sur, en el preludio de un posible repliegue total.
Según las fuentes, acompañan a Bush los secretarios de Estado, Condoleezza Rice, y de Defensa, Robert Gates, así como el consejero de Seguridad Nacional, Stephen Hadley.
El visitante sólo se entrevistó con las autoridades militares de la base aérea y no se pudo precisar si se encontraría con el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, o alguna otra autoridad local.
Recientemente, Bush respaldó la permanencia de Al Maliki al frente de la administración en Bagdad ante algunos políticos estadounidenses que le acusan de incompetente en el desempeño de sus funciones en cuanto a la estabilidad iraquí.
Esta visita sorpresiva del presidente estadounidense tiene lugar una semana antes de que en Washginton presenten sus informes sobre la situación de seguridad en Iraq el jefe del ejército norteamericano aquí, David Petraeus, y el embajador, Ryan Crocker.
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