Se basa en el libro escrito por L. Frank Baum e ilustrado por W. W. Denslow, donde narra las aventuras de una muchacha llamada Dorothy en la tierra de Oz y que se ha convertido en una de las historias más conocidas de la cultura popular norteamericana.
Dirigida por Víctor Fleming y protagonizada por Judy Garland, Frank Morgan, Ray Volver, Bert Lahr, Jack Haley, Billie Burke, Margaret Hamiltion, Charley Grapewin y Clara Blandick, "El mago de Oz" ha sido traducida a muchos idiomas.
Disfrutar de "El mago de Oz" es sumergirse en un mundo de fantasía, de brujas, de hadas, de magos, de sueños, de ilusiones…es volver a creer en los cuentos. Es una película perfecta para ver en familia, apropiada para todas las edades, para amantes de los musicales, de la fantasía y del cine en general.
He aquí algunas de las incidencias curiosas de su filmación en los estudios de la MGM, en 1939.
- La estrella originalmente elegida para hacer el papel de Dorothy en esta película era Shirley Temple, que unos años antes había sido la sensación taquillera en el cine. Pero cuando llegó finalmente la hora de la filmación ya el encanto de ella se había empañado en parte y los productores prefirieron otra estrella juvenil.
- Antes de aparecer en esta cinta, Judy Garland había actuado en algunas películas mediocres de la Metro-Gold-wyn-Mayer, un estudio que no sabía qué hacer con una adolescente de tan poderosa voz, pero un poco gordita. El tiempo ha dicho que nadie como Judy habría hecho tan bien el papel de la niña de Kansas perdida en un reino mágico.
- Todos los días, antes de vestirse para el personaje de Dorothy, entre su madre y las encargadas de vestuario tenían que envolver los nacientes senos de Judy con una banda de tela, para evitar que el personaje se viera demasiado adulto.
- Las trenzas de Judy Garland cambian de largo constantemente durante el transcurso de la película. Los encargados de la peluquería no se dieron cuenta de ese detalle al ponerle los postizos cada día.