SANTO DOMINGO.-El doctor Max Puig, presidente de la Alianza por la Democracia (APD), pidió castigo para los corruptos y advirtió que los cambios que necesita la sociedad dominicana son inaplazables. Puig intervino el domingo en un acto multitudinario donde se cerraron los trabajos del Congreso APD 2007, que dotó de nuevas políticas a esa agrupación en los aspectos de género, juventud, ética, política nacional e internacional y estatutos.
“Si no se le pone un freno al deterioro ético en la política, de parte de personas y sectores que colocan sus intereses particulares por encima de los intereses de la nación, se producirá, más temprano que tarde, el deterioro y posible colapso del sistema político”, indicó.
Sostuvo que los corruptos son los malos dominicanos a los que se refería el Padre de la Patria, Juan Pablo Duarte.
“El clientelismo, el patrimonialismo y la corrupción siguen afectando el sistema político dominicano, lo que también frena el desarrollo económico, político y social de la República Dominicana”, enfatizó.
El presidente de la APD afirmó que las transformaciones que necesita la sociedad dominicana son inaplazables y dijo que si las mismas no producen en un tiempo prudente el futuro de la nación está en entredicho.
“Estimamos que si estos cambios no se producen, en tiempos relativamente breves, el futuro de la nación dominicana está en entredicho. O nos transformamos y avanzamos, o corremos el riesgo de perecer como conglomerado independiente en el concierto de las naciones”.
Puntualizó que la APD está comprometida con la elaboración de un programa de avanzada en las estructuras que rigen la sociedad dominicana.
“Nos comprometemos a participar en la elaboración conjunta de un programa de avanzada, de cambios reales, de transformaciones de fondo, de la sociedad dominicana, pero tiene que haber un compromiso al mas alto nivel para la concertación de una política social que beneficie a los mas desfavorecidos”, dijo Max Puig, presidente de la agrupación.
Dijo que la participación de la APD en el Bloque Progresista, que apoya la candidatura del doctor Leonel Fernández Reyna a la presidencia de la Republica obedece a su interés de que se establezcan en el país programas de lucha contra la pobreza.
Dijo que en lo adelante hay que trabajar para enfrentar los niveles de exclusión social que afectan a la población dominicana.
El Congreso APD 2007 reunió a delegados e invitados procedentes de todo el país y del exterior, destacándose la presencia de los representantes de Nueva York y Panamá.
En las sesiones de trabajo, que se extendieron por tres días, los participantes adoptaron las nuevas políticas sobre juventud, mujer, ética, línea política nacional e Internacional y articulación social. Los delegados aprobaron, además, la modificación de los estatutos de la APD y ratificaron a Max Puig como presidente de la agrupación.
El congreso de la APD se extendió a lo largo de siete meses. En su primera fase se produjo una consulta nacional en la que participaron no solamente miembros y afiliados, sino que estuvo abierta a la ciudadanía bajo el lema de “el primer turno lo tiene el pueblo”. La realización de seminarios, encuentros y talleres permitieron el conocimiento y discusión de los documentos que fueron conocidos en el cónclave.
Expresó que la APD se ha ganado un lugar importante en la política nacional al convertirse en la cuarta fuerza política electoral del país.
Por mandato del congreso, la APD se comprometió a apoyar en el ámbito nacional acciones orientadas a erradicar la pobreza y en el plano internacional a adscribirse a acciones que procuren la paz y la construcción de un mundo multipolar.
El congreso de la APD decidió que el 33 por ciento de sus puestos directivos estén en manos de las mujeres e impulsar iniciativas para eliminar los aspectos que la discriminen y limiten su participación política.
“Establecemos la cuota de un 33% mínimo de mujeres en todas las instancias de la APD, como mecanismo de acción afirmativa, con la salvedad de que si no hay un numero suficiente de mujeres organizadas, hacerlo de manera progresiva con la garantía de cumplir con lo establecido”, dice el documento aprobado por los delegados.
Según la resolución, la participación de la mujer es uno de los aspectos esenciales para lograr el fortalecimiento del sistema democrático. “Hoy en día, es imposible fortalecer la democracia, si no se crean condiciones de igualdad entre hombres y mujeres”.
Las resoluciones adoptadas en el tema de juventud están orientadas a la capacitación y al empleo.
“La primera barrera que tiene el sector joven en la difícil tarea de buscar trabajo, es la formación y calificación, así como experiencia laboral; algo que no se tiene lógicamente en casi todos los casos porque se pretende acceder a un primer empleo”.
La APD concluyó que para tener éxito en las políticas de juventud hay que romper el círculo vicioso de su problemática e impulsar acciones integrales en su beneficio.