SANTIAGO.- La Corte de Apelación de este distrito judicial se reservó para el 26 de este mes la emisión del fallo de un recurso interpuesto por el empresario Adriano Román Román, contra el dispositivo de la sentencia del 24 de mayo que lo halló culpable de fraguar el asesinato de su ex esposa, Miguelina Llaverías, por lo que fue condenado a 20 años de prisión. La apelación conocida ayer se refiere al dictamen que evacuó el Primer Tribunal Colegiado, lo que solo fue apelado por él, mientras que la misma sala de audiencias habrá de conocer un recurso similar el 2 de octubre próximo, pero contra la sentencia completa, recurrida por todos los condenados.
La audiencia de ayer comenzó a eso de las 9:30 de la mañana y concluyó tres horas, decidiendo el tribunal dar a conocer el fallo el 26 del mes en curso. La Corte de Apelación está compuesta por los licenciados Saúl Canaán, María Santana y Francisca Javiela García.
En primera instancia, los jueces encontraron culpable a Román Román de haber ideado el intento de asesinato de Llaverías, el dos de octubre del 2005, por lo que fue condenado a 20 años de prisión y cinco millones de indemnización, en beneficio de la víctima.
El principal inculpado es Dámaso Nova Peralta, a quien se le impuso una pena de 30 años de cárcel y 10 millones de multa, en tanto que Engels Manuel Carela Castro y Fausto Aris Pérez Díaz corrieron la misma suerte de Román.
El grupo fue procesado por el Primer Tribunal Colegiado de aquí bajo las acusaciones de intento de asesinato y asociación de malhechores. Llaverías recibió un disparo a quemarropa que le penetró por el lado derecho del cuello y saliendo por la parte izquierda de la cara.
La señora Llaverías fue representada en el juicio de ayer por los licenciados Jordy Veras Rodríguez y María Alejandra Veras Pola, en tanto que Román Román fue asistido en sus medios de defensa por los doctores Carlos Balcácer y Francisco Taveras.
Hace 29 años, la sociedad de Santiago fue estremecida tras conocerse que Román Román sometió a crueles torturas a su entonces esposa Miguelina Llaverías, por cuya acción apenas fue condenado a 100 pesos de multa.
Los golpes y vejaciones recibidos por la mujer degeneraron en el divorcio de la pareja, pero pocos años después volvieron a casarse, hasta que hace algún tiempo rompieron definitivamente sus relaciones.