SANTIAGO.- El Ayuntamiento designó con el nombre de Vanessa Ramírez Faña el antiguo camino a los Cerros de Gurabo, con lo que eterniza la memoria de la estudiante de medicina que fue asesinada en junio del año pasado por tres individuos, tras resistirse a ser despojada de un celular que finalmente se llevaron. En una ceremonia realizada en el sector Cerro Hermoso, donde vivía la joven con sus padres, fue común entre quienes hicieron uso de la palabra el llamado a las autoridades para que hagan mayores esfuerzos, a fin de frenar el auge de la delincuencia.
Tanto el síndico, José Enrique Sued, como el doctor Juan Ramírez, padre de Vanessa, fueron los que con mayor énfasis tocaron el tema, definiendo a la joven asesinada como “una mártir de la delincuencia que da la impresión no hay forma de controlarla”.
Con la designación de dicha calle con el nombre de Vanessa Ramírez Faña se dio cumplimiento a la resolución 2781-06, emitida por la Sala Capitular el 30 de junio del pasado año, 21 días después del crimen perpetrado en su contra, por cuyo hecho fueron condenados Angelo Iván Ventura Herrera, Francis de Jesús García, Ricardo Alejandro Reyes Martínez y Amaurys Germán Tavárez.
Al enjuiciar el hecho que terminó con la vida de Vanessa, el síndico Sued dijo en el acto que “si nos dejáramos arropar de esa vorágine antihumana, propia de la selva y de los animales depredadores, llegaríamos a la infeliz conclusión de que hoy la vida no vale nada”.
“Con esta ceremonia hacemos un homenaje póstumo a nuestra ‘mariposa de la paz’ y, al mismo tiempo, un reconocimiento especial a sus padres y demás familiares, quienes no desmayaron en su lucha para que el horrendo crimen no quedase impune y por la fortaleza espiritual que han exhibido en los momentos más difíciles”, agregó.
En representación de la familia de Vanessa habló su padre, el doctor Juan Ramírez, quien agradeció a la ciudadanía el respaldo moral que siempre le ha brinda a los parientes de la joven fallecida.
La ceremonia fue aprovechada para inaugurar lo que se ha denominado como “monumento a Vanessa”, localizado en la misma calle, el que fue bendecido por Miguel Marte, párroco de la iglesia San Ramón. Las palabras de bienvenida fueron pronunciadas por el doctor Rufino Ozoria, presidente de la Junta de Vecinos de Cerro Hermoso.
Correspondió a la doctora Rosaida Faña, madre de Vanessa, presentar el perfil bibliográfico de la joven asesinada; el licenciado Máximo Anico Guzmán, secretario municipal, leyó la resolución y que luego entregó a los padres de la fenecida, acompañado de Pedro Cáceres, presidente del Ayuntamiento.