LA HABANA, 18 sep (IPS) – El gobierno cubano anunció este martes que presentará por decimosexta ocasión ante la ONU una moción contra el bloqueo estadounidense que, según calcula, le ha causado perjuicios superiores a los 89.000 millones de dólares en algo más de cuatro décadas.
Este proyecto de resolución será sometido a votación el 30 de octubre en la Asamblea General de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), donde Cuba espera que su resultado pruebe una vez más el rechazo que esta política concita en el ámbito internacional, dijo en conferencia de prensa el canciller de este país, Felipe Pérez Roque.
El pasado año, un texto similar recibió 183 votos a favor, cuatro en contra (Estados Unidos, Israel, Palau e Islas Marshall) y la abstención de Micronesia. El apoyo a la demanda cubana ha ido aumentando de manera sostenida desde su primera presentación, en 1992, cuando recibió el respaldo de sólo 59 países.
El jefe de la diplomacia cubana confirmó, además, que en el transcurso del nuevo período de sesiones de ese foro mundial sostendrá un "encuentro exploratorio" con la troika de la Unión Europea (UE) y con el canciller de España, Miguel Ángel Moratinos,
La UE suele votar en bloque a favor de la resolución que pide el cese del embargo económico y comercial de Estados Unidos, pero a la vez mantiene una actitud crítica hacia Cuba por el tema de los derechos humanos, lo cual provoca fricciones y distanciamientos bilaterales.
Al respecto, Pérez Roque insistió en que el encuentro se llevará a cabo a propuesta de los europeos y sólo será exploratorio, pues un "diálogo político formal" no puede establecerse "hasta que no sean levantadas las sanciones arbitrarias que la UE adoptó contra Cuba".
La UE adoptó en 1996 la llamada posición común, para exigir cambios políticos y económicos a esta isla de sistema socialista, a lo cual adicionó en marzo de 2003 una serie de medidas diplomáticas como reacción al arresto de 75 disidentes y la ejecución de tres personas que secuestraron una nave con todo su pasaje a bordo con la intención de emigrar.
Las medidas se encuentran suspendidas desde 2005 e incluyen, entre otras, la restricción de visitas oficiales de alto nivel a Cuba y la invitación a disidentes a las recepciones de las embajadas de la UE en La Habana.
En el diálogo exploratorio deben quedar explicadas "claramente nuestras posiciones", indicó el ministro cubano, quien elogió el "papel constructivo" de la presidencia temporal de Portugal en la búsqueda de esos contactos y comentó que la Comisión Europea, el órgano ejecutivo de la UE, también ha tenido una postura positiva..
La reunión con Moratinos, en tanto, es parte de los intercambios regulares acordados entre ambos cancilleres durante la visita del español a La Habana en abril, explicó Pérez Roque.
Según el ministro, en esa cita, se conversará sobre la manera en que avanza la relación bilateral, incluido el viaje de la secretaria de Estado para la Cooperación, Leide Pajín, previsto para fines de septiembre, a fin de encabezar las sesiones de la comisión mixta España-Cuba.
El restablecimiento de esa comisión para la cooperación es uno de los resultados de la visita de Moratinos, recibido en La Habana por el presidente en funciones Raúl Castro. En ese entonces, Pérez Roque señaló que España se apartó de un "camino de imposiciones y de condicionamiento político", lo cual facilitó el restablecimiento de la comunicación.
La ofensiva diplomática cubana en la ONU contra el bloqueo (que Washington llama embargo) es la segunda que se lleva a cabo en ausencia del líder cubano Fidel Castro, quien el 26 de julio de 2006 fue sometido a la primera de varias operaciones por problemas intestinales y delegó provisionalmente el mando en su hermano Raúl.
Estados Unidos inició formalmente el embargo económico, comercial y financiero el 3 de febrero de 1962 y desde entonces a la fecha, siete de cada 10 cubanos han nacido y vivido bajo esa política, que Pérez Roque calificó de "genocida" y de guerra no declarada contra un país que no constituye una amenaza para Washington.
El gobierno cubano considera que la actual administración estadounidense de George W. Bush ha acrecentado todas las restricciones contenidas en el embargo, que también perjudica los intereses y derechos del pueblo de ese país norteamericano, a cubanos residentes allí e inclusive de ciudadanos de terceros estados debido a la aplicación extraterritorial de las prohibiciones. (FIN/2007)