SANTO DOMINGO.-La mejor plataforma promocional para la repostulación del presidente Leonel Fernández, para esta campaña electoral, no es exhibir algún programa de gobierno, son las ejecutorias de la presente administración las que respaldan sus intenciones de continuar dirigiendo a la nación por los senderos del progreso.
Así lo ha manifestado la alta dirigente del PLD, Alejandrina Germán, quien afirmó que la oferta de su partido es exhibir las experiencias, los logros, de los dos gobiernos peledeístas y demostrarle al país cómo gobiernan los peledeístas y cómo engendran crisis y desconfianza los perredeístas, y que se trata de balancear progreso contra retroceso.
Citó, por ejemplo el crecimiento económico estable, la generación de la confianza, la modernización del sistema educativo, la mejoría de servicios de salud, disminución del desempleo, entrada del Seguro Familiar de Salud, la construcción de más 3 mil nuevas aulas, la ejecución en todo el país de las tarjetas Solidaridad y Joven Universitaria, la modernización de programas para la educación de adultos, creación de centros de informática en zonas rurales y la capital, entre otros logros.
Añadió que “una cosa son las promesas, otros los hechos”, en referencia a la serie de ofrecimientos del candidato blanco Miguel Vargas, quien en su momento al frente de Obras Públicas no hizo nada por el país.
Germán le exhortó a Vargas a no avergonzarse de su partido, con una mala referencia histórica para el país, y a no querer aparentar que un PRD nuevo, cuando todos sus asesores fueron responsables del desastre económico llamado Hipólito Mejía.
Dijo que así como nadie le gana corriendo a Félix Sánchez, ni nadando a Marcos Díaz, así mismo, nadie puede ganar más cariño en la población como el presidente Fernández.
Al ser cuestionada por el periodista Danny Alcántara, en Matinal 5 de Telemicro sobre el inicio de la campaña del PLD, Germán indicó que “la principal fuerza política dominicana no puede darse el lujo de mantenerse inactiva mucho tiempo, por más de cuatro meses (mayo-septiembre), pues se pierde el entusiasmo y el espíritu de polémica en la población”, por lo que ya el partido está tirado a la calle, y sobretodo unido como nunca antes.