SANTO DOMINGO.- “No corresponde a la verdad”, dijo Rafael Molina Morillo al regresar ayer al país desde Miami, cuando se le mostró el titular principal del “Listín Diario” que decía que el Banco Central fue condenado por la Sociedad Interamericana de Prensa por discriminación en la colocación de su publicidad a los medios. “Los hechos han sido manipulados”, explicó Molina director de EL DÍA, quien presidió la sesión donde se discutían los informes país por país, antes de entregar la presidencia de la SIP a Earl Maucker, de “The Sun-Centinel”, un periódico de Fort Lauderdale, en La Florida. Molina pasa ahora a presidir la comisión de Nominaciones.¨ La SIP no emitió ninguna resolución condenando al Banco Central, como informó el “Listín Diario”.
El organismo se limitó a consignar la denuncia hecha por el director de ese medio, Miguel Franjul. Molina narró que objetó un párrafo propuesto por Franjul para ser agregado al informe sobre la libertad de prensa en República Dominicana. Sustentó Molina su posición en que el texto aludido daba la impresión de que los criterios de Franjul eran criterios de la SIP, y ésta no debía tomar posiciones en un caso que todavía está en manos de la Justicia.
El texto en cuestión fue entonces elaborado de manera tal que no involucra a la SIP y se limitó a consignar que Franjul habia hecho una denuncia. “Lamento mucho que el señor Franjul aparentemente se ha molestado conmigo porque no estuve de acuerdo con la manera en que él quería insertar su queja, pero mi deber como asociado y presidente de la SIP era preservar la credibilidad de esa sociedad”, dijo el director de EL DIA.
El informe sobre República Dominicana fue elaborado y presentado por el vicepresidente de la Comisión de Libertad de Prensa para este país, Manuel Quiroz, director de “El Caribe”. A ese informe se le agregó el siguiente párrafo: “El director del periódico Listín Dirio, Miguel Franjul, ha denunciado en esta asamblea presiones de autoridades, las que habrían incluído un boicot publicitario y otros tipos de hostigamiento por más de dos años”.
EL EDITORIAL DE EL DIA SOBRE EL MISMO CASO
Nobleza y vileza
Hay una frase clásica en el ámbito periodístico que reza que éste, el periodismo, puede ser la más noble de las profesiones o el más vil de los oficios. Obviamente, lo que se está haciendo en el “Listín Diario” encaja perfectamente en la segunda de las dos acepciones citadas.
El titular principal de ayer en ese periódico decía textualmente: “SIP condena Banco Central discrimine al Listín Diario”, con lo que incurrió en una burda mentira al atribuirle a la Sociedad Interamericana de Prensa actitudes que no ha asumido.
Es oportuno explicar que, así como los jueces hablan por sentencias, la SIP habla por Resoluciones, y en la recién transcurrida asamblea del organismo hemisférico, celebrada en Miami, no se produjo ninguna resolución condenatoria específicamente contra la República Dominicana. La única resolución que se refirió a nuestro país fue la relativa a la publicidad oficial, y esta mención se limitó a incluir a la República Dominicana en una lista de nueve naciones en las cuales se ha denunciado discriminación en el reparto de publicidad oficial. En otras palabras, lo que se hace consignar es que ha habido denuncias en ese orden y que, en caso de ser ciertas tales denuncias, ello es nocivo para la libertad de prensa.
De ahí a afirmar que la SIP “condenó y repudió” la discriminación “que realiza el Banco Central” contra el “Listín Diario”, hay un gran trecho.
Por otra parte, también es bueno explicar que en la SIP una cosa es una resolución y otra cosa es un informe. El informe sobre el estado de libertad de prensa en la República Dominicana fue rendido por el vicepresidente para este país, Manuel Quiroz, director de “El Caribe”.
El director del “Listín Diario”, Miguel Franjul, propuso agregarle un párrafo con afirmaciones acusatorias contra las autoridades dominicanas por supuestos intentos de confiscación. El director de EL DIA, Rafael Molina Morillo, objetó la redacción de dicho párrafo porque daba la idea de que la SIP avalaba esas acusaciones, las cuales eran extemporáneas porque el caso del “Listín Diario” todavía se encuentra en una fase judicial pendiente de un fallo final de la Justicia.
Hechas estas aclaraciones, EL DIA ni su director volverán sobre el tema y se remiten al juicio de la opinión pública. No sin antes dejar consignado que la libertad de prensa, si no va acompañada de la verdad, puede convertirse en un arma peligrosa.